Durante el verano exponemos el pelo al sol, el mar, el cloro de la pileta, el viento, todos factores que lo debilitan o lo dañan. El secreto de un cabello saludable está en volver a cerrar las cutículas que todos esos elementos característicos del verano abrieron provocando el frizz, las puntas abiertas y la opacidad.

Además de proteger el pelo durante las vacaciones y evitar exponerlo al sol, al agua con sal o cloro y al viento es necesario realizar rutinas diarias de cuidado capilar para volver a un cabello saludable. Esto se logra con productos que no tengan tanta concentración tóxica en sus fórmulas.

Por ejemplo, los geles o fijadores para el pelo suelen empeorar el estado en el que se encuentra. Por eso se recomienda utilizarlos en ocasiones muy puntuales y combinarlos con shampoo y acondicionador de calidad para cuidar la salud del pelo todos los días.

Otro consejo es realizar una mascarilla capilar al menos una vez por semana. La coach de imagen española Rogelaine Tomé da Costa recomendó: "Debido al tiempo que se deja este producto en el cabello, penetrará en el tallo capilar para restaurar la humedad. En primer lugar, hay que mojar ligeramente el cabello y luego aplicar la mascarilla capilar asegurándonos de que todos los mechones están incluidos. Luego, hay que envolver la cabeza con una toalla durante una hora o más".

El calor de las planchitas y los secadores de pelo también lo dañan, por eso es importante respetar el límite de temperatura con el que vienen programadas. Para evitar que se abra la cutícula y mantener un cabello saludable también se puede utilizar un aceite especial para el momento previo al aplicado de calor.

Cuidados específicos para un cabello saludable

• Usar un cepillo de cerdas naturales. Si el pelo es débil, quebradizo y está dañado cepillarlo de forma suave al principio para no partirlo de más. De esta forma se estimula el cuero cabelludo.
• Animarse a cortar. Si el pelo está dañado es probable que debamos cortar las puntas dañadas y si está extremadamente dañado, podría ser necesario un corte por completo o un tratamiento recuperador.
• Cuidar la alimentación y los estados emocional, hormonal y metabólico. Mantener un estilo de vida equilibrado también influye en la salud del cabello.
• Conservar la humedad del pelo y las cutículas cerradas para prevenir la pérdida excesiva de los pigmentos de la tintura. Por eso, convienen las fórmulas con keratina para suavizar y humectar la fibra y mantener un cabello fuerte. Así se previene el frizz ya que cuida la elasticidad del cabello y el brillo.
• Para pelos decolorados, se recomiendan productos de reparación que comiencen desde el interior del cabello porque evita que se quiebre.
• En el caso del pelo amarillento y reseco como consecuencia de factores del verano (sol o pileta), se pueden apagar estos matices usando shampoo y máscara con pigmentos violetas que generan una neutralización del reflejo indeseado cálido, dejando un color frío. Se recomienda aplicar ambos una vez por semana.
• El cuidado de las canas. Existen productos exclusivos para resaltarlas y cuidarlas con extractos de arándanos otorgándoles además más brillo y más suavidad.