La líder de la Coalición Cívica se refirió al aumento salarial de los legisladores, analizó a los economistas liberales que cita Milei y aseguró que el presidente es un "dictador popular". Además, interpretó el rol de la "jefa", Karina Milei y develó cuál es el "becerro de oro" en Argentina.
La líder de la Coalición Cívica, Elisa Carrió, volvió a cuestionar la gestión del gobierno libertario y compartir su opinión sobre temas de relevancia nacional. En una entrevista exclusiva concedida a Infobae, Carrió aseguró que "Milei va por la derogación de la Constitución, esa es su utopía".
Según la exdiputada, "no hay hoy en Argentina un espacio para la razón y para la argumentación". Esta realidad, Carrió la atribuye a "la ignorancia". "Lo que pasa que de la ignorancia viene la estupidez humana, y de la estupidez humana puede venir el mal, el mal radical", previó.
La dirigenta explicó su postura ante las ideas anarcocapitalistas que inspiran al presidente y destacó la necesidad de reformar el Estado, aunque advirtió sobre los riesgos de eliminarlo por completo. "Él (Milei) va por la derogación de la Constitución, porque si vos sos anarcocapitalista vos no tenés que tener Estado. Es decir, tenés que tener el apoyo popular para cambiar la Constitución y para derogarla, esa es la lucha cultural; esa es su utopía", afirmó Carrió.
La líder de la C.C - que lleva 50 años de trabajo: 30 de carrera política- también expresó su acuerdo con la idea de mejorar la calidad de la educación y achicar el Estado, pero advirtió sobre las consecuencias de su desaparición. "Si un Estado desaparece y las grandes potencias están en guerra, tu territorio va a ser apoderado a través de inversiones privadas por esos estados que están en guerra", observó.
En cuanto al proceso liderado por Milei, Carrió criticó su metodología y señaló que "las facultades delegadas no hay que dárselas a nadie nunca, porque terminan en corrupción". Sobre la metáfora bíblica que suele divulgar el presidente de que él es Aarón y de que su hermana Karina, "la jefa", es Moisés, Lilita observó cuál sería el "becerro de oro" en la Argentina: "Clarísimo, el dólar. Nuestro Dios, desaparecido Dios de la Argentina hace mucho tiempo". En este sentido, advirtió sobre lo que sucedió tras el gobierno menemista que privatizó todo: "Es muy gracioso cómo nos roban, y además lo ponen a (Ariel) Lijo de juez de la Corte. Entonces, yo creo que lo que Milei hizo fue cambiar la casta con la mafia".
Los sueldos de los senadores y su realidad financiera: "Ya no tengo más cuadros valiosos que vender"
Carrió expresó su desacuerdo con el aumento de sueldos de los senadores, aunque respaldó la garantía de que estén enganchados a la categoría 1 de la cámara. Por último, reveló que no le alcanza la jubilación para cubrir sus gastos. "Yo tendría que ganar al menos 2 millones de pesos de jubilación, que es lo que está ganando un profesor titular con dedicación exclusiva, y con antigüedad. Ahora, sin embargo gano 700, ¿por qué? Porque cuando yo me jubilé, y por esta cuestión demagógica frente a la sociedad, (Emilio) Monzó no aumentó más los sueldos", explicó.
En cuanto a la situación que atraviesa la clase media, la dirigenta detalló que "la mayoría de los jóvenes no pueden construir una familia, por eso solo pueden tener un perro. Porque si yo tengo que mandar a los chicos al colegio, si hoy un jardín de infantes te está saliendo 400.000 pesos, si vos tenes tres hijos y tenes un millón de ingresos, o dos millones, no podes vivir. Es más, la baja del consumo de carne parece un dato".
En el mismo sentido aseguró que si un jubilado está comiendo una vez por semana proteínas, "ese hombre se muere 10 años antes". "Yo aunque sea exitoso este modelo no lo quiero para la humanidad, no creo en la idolatría del dólar", sentenció contundente.
A Carrió, por su parte, no le quedan ni ahorros: "Yo vendo cosas, pero ya no tengo que vender, ya no tengo más cuadros valiosos que vender". "No puedo vender mis órganos porque están afectados por innumerables enfermedades, así que soy incomprable, e infumable", bromeó.
