En la misma ronda de entrevistas radiales que dio esta mañana, cuando confirmó que Luis Caputo sería su ministro de Economía, Javier Milei mencionó a Gerardo Werthein como su embajador en Estados Unidos y a Daniel Scioli como el representante argentino en Brasil, cargo que ya viene desempeñando desde la gestión de Alberto Fernández.
Consultado sobre qué pasará con el cargo de Scioli en la embajada de Brasil, Milei respondió que “la idea es que por el momento continúe en esa tarea”. Por otra parte, respecto de uno de sus acompañantes en el viaje a Estados Unidos, Gerardo Werthein, el presidente electo declaró que “puede ser nuestro embajador” en ese país.
¿Quién es Gerardo Werthein? Un empresario formado al calor del negocio familiar, que resulta ser uno de los holdings más grandes del país; extitular del Comité Olímpico Argentino y presidente de un club de campo que fue escenario de lujosas fiestas hípicas.
En el grupo Werthein, fundado por sus antepasados, tuvo un rol importante cuando el fondo era dueño de Telecom Argentina S.A., hasta su compra por parte del Grupo Clarín. El fondo de la familia del próximo embajador está presente en negocios tan diversos como el agrícola-ganadero, el inmobiliario, el de los hidrocarburos y el de las telecomunicaciones, siendo una de sus movidas más recientes la compra de los servicios de DirecTV en 11 países de América Latina.
Tras tomar cierta distancia del negocio familiar, el acompañante de Milei en su viaje a Estados Unidos presidió el campo Haras El Capricho, escenario de múltiples fiestas hípicas a las que solían asistir famosos y personas de alto poder económico. Además, es accionista en el diario uruguayo El Observador, con Gabriel Hochbaum como socio.
El nombramiento de funcionarios vinculados con el empresariado nacional e internacional, así como la designación de personas cercanas al macrismo y el menemismo, fue moneda corriente en el armado del gabinete del próximo gobierno. Quizás uno de los nombramientos más disonantes en ese contexto sea el de Daniel Scioli, quien, por ahora, continuará al frente de la embajada argentina en Brasil.
En los últimos días, el dirigente históricamente vinculado al peronismo se reunió con la próxima canciller, Diana Mondino, para conversar sobre la relación con el país vecino e intermediar con el gobierno brasileño para reducir tensiones. En ese entonces, la propia Mondino expresó que la voluntad de LLA es que Scioli siga en su cargo y así lo ratificó Milei esta mañana.
Por su parte, el exgobernador bonaerense manifestó su intención de colaborar y la maniobra ya despertó críticas en su entorno partidario, especialmente de parte de Alberto Fernández. “Yo creo que para cualquiera que haya trabajado en nuestro gobierno tiene que ser objetivamente imposible trabajar con Milei”, soltó esta semana el presidente.
