Son horas clave en la definición del gabinete de Javier Milei. Sin embargo, hay algunos puestos que ya estaban previstos incluso desde antes de ganar el balotaje. Uno de ellos es el del director del Conicet, al que el libertario anunció durante su campaña que va a cerrar o privatizar. Daniel Salomone es el principal apuntado a hacerse cargo de dirigir el organismo científico o bien de conducir la secretaría de Ciencia.

Aún quedan cosas por definir, pero el médico veterinario y referente científico de Javier Milei habló con el diario Clarín en la previa de la asunción del nuevo gobierno. Daniel Salamone se especializa en fecundación in vitro, clonación y transgénesis y es investigador del Conicet. Además, dirige el Laboratorio de Biotecnología Animal de la UBA.

En principio dijo que durante la presidencia de Milei efectivamente se va a "privatizar o cerrar", decisión que no sorprende porque ya lo anunció el propio presidente electo en reiteradas oportunidades antes de ganar las elecciones. Sin embargo, aclaró que la idea no es "echar investigadores ni becarios" sino pensar en cómo hacer una investigación productiva y rentable: "Tenés que ser productivo de algún modo, generar conocimiento. Las publicaciones son la vara. Si no, ¿cómo diferenciás un chanta de uno que no lo es? Los recursos siempre son finitos y si algo extremadamente complejo no va a dar recursos en un país con tanto hambre", dijo.

Con respecto a los cambios que se vienen en la ciencia, contó que habló con Milei para "tratar de conseguir, además de mecanismos de financiamiento, fondos de inversión para crear una suerte de cartera de proyectos que compitan, con un horizonte puesto en formar empresas start-up".

Además, adelantó que hay que "escuchar" a los investigadores y a los becarios del Conicet para conocer qué los preocupa y cuales son sus problemas: "Parte de ser eficiente es monitorear lo que pasa. Yo antes iba a laboratorios de otros lugares del mundo y volvía al mío y me daban ganas de llorar. Veinte años de trabajo después, he logrado mejorar un poco mi entorno laboral, pero por supuesto que creo que hay que monitorear y siendo el Conicet un instituto de investigaciones, sería fundamental que nos investigáramos a nosotros mismos".

En cuanto a otros cambios que harán dentro del Consejo, explicó que "Cuando uno entra al diálogo político, hay que escuchar a todas la partes, pero en nuestro núcleo vemos que hoy los becarios están vedados en sus posibilidades de recibir algo extra, incluso si su trabajo incluye la participación de una empresa y la empresa es la que financia". Y agregó: "Estamos en un momento de recesión económica. Si no queremos ir a una hiperinflación, todos tenemos que hacer un esfuerzo. Una tendencia que hay es a reducir las entradas a Conicet. Se ha hecho en el pasado. Estamos considerando implementar becas cofinanciadas, pero a veces uno se encuentra con situaciones en que se hace muy difícil mantener al becario trabajando porque hay estímulos desde la actividad privada".

Además, profundizó sobre la reducción de gastos en el Conicet: "un problema que hemos tenido es que ha estado incrementando el número de investigadores, que se ha triplicado. Sin embargo, en los últimos años vimos que no aumentó la producción. El crecimiento indiscriminado no basado en la calidad, podría eventualmente afectar al sector". Y sumó que: "En caso" de tener que reducir los gastos, "la máxima preocupación es qué pasará con los profesionales. No queremos que se vayan del país; mucho menos, la gente más talentosa".

Para cerrar, le dio un mensaje a todos los investigadores del Conicet que temen perder su trabajo: "Tranquilidad, ingenio y trabajar. Jamás paralizarse porque nuestra vida es nuestro cv. Es lo que publicamos, lo que escribimos y las charlas que damos. Eso es lo que siempre nos va a proteger".