La tortuguita es un corte de los más económicos en la carnicería, pero que puede llegar a quedar muy bien en la parrilla si se cocina de la manera adecuada. Hacerla rellena de de queso, cebolla y especias es ideal.
A la hora de ubicar a la tortuguita en la res, tenemos que ir a la región de la pierna de la vaca, que limita con la nalga y con la bola de lomo. Representa el gastrocnemio del animal, algo así como los "gemelos" de nuestra pierna. El resultado es una carne magra, con poca grasa pero aún muy sabrosa, compuesta por varias capas de músculo recubiertas con membranas y tendones.
Al tratarse de una carne muy gruesa, pero sin hueso, su cocción a la parrilla debe ser lenta para evitar que se seque y se endurezca. Si la hacemos rellena, impulsaremos aún más sus sabores.
Cómo preparar la más deliciosa tortuguita rellena a la parrilla
La tortuguita rellena a la parrilla es un plato sencillo y delicioso. Se puede servir como plato principal (acompañado de ensalada, papas al horno o arroz) o como parte de un asado. Sin embargo, de acuerdo a la cantidad de carne, debiera alcanzar para todos.
Ingredientes
- 1 tortuguita de 800 g
- 250 g de queso cremoso
- 3 dientes de ajo picados
- 1 ramito de hojas de albahaca picada
- 1 cebolla salteada picada
- ½ hoja de laurel en 4 trozos
- Sal parrillera
- Pimienta
La preparación es muy sencilla y lleva pocos pasos, pero que deben seguirse al pie de la letra. Vas a tener que:
- Precalentar la parrilla a fuego medio.
- Abrir la tortuguita y colocar el queso cremoso, el ajo picado, la albahaca picada, la cebolla salteada y el laurel picado en el interior de la carne.
- Cerrar la tortuguita con palillos de madera.
- Salpimentar la tortuguita por fuera.
- Colocar la tortuguita en la parrilla y cocinar durante 40 minutos.
- Dar la vuelta y dejar hasta que la carne esté tierna y el queso derretido.
Para el relleno puede utilizarse otros ingredientes, como panceta, jamón, chorizo o verduras. Se le puede añadir vino blanco o cerveza a la cocción para que la carne quede más jugosa
