Hay que saltar / hay que saltar / el que no salta / es radical cantó el público cuando Javier Milei mencionó a Leandro Santoro y su pedido de "censurar" libertarios en la televisión. "En el fondo tienen algo de espíritu populista, cómo saben las canciones que me gustan, eh", reconoció su líder.

Si no fuera por los leones y la música estridente, el cierre de campaña podría confundirse con un estadio lleno de militantes peronistas. Pero no, con Panic Show de La Renga musicalizando el momento, Milei ingresó al Movistar Arena entre el público y con sus guardias de seguridad luchando con la marea de gente para que el candidato presidencial llegue al escenario entre celulares, flashes y pelotas de La Julio Argentino.

Minutos antes, en la pantalla grande se pasó un nuevo spot de campaña de La Libertad Avanza (LLA) y un compilado de videos de edificios explotando y desplomándose. Alberto Benegas Lynch hijo ya había terminado su discurso en el que pidió romper relaciones con el Vaticano entre gritos de "¡Libertad!" de parte de los seguidores libertarios.

En la misma línea que sus seguidores, en su discurso el líder de LLA insistiría: "Hay gente que no quiere cambiar, que se beneficia de este sistema, que quiere mantener el status quo, a esa gente le decimos que no nos voten porque no nos interesan, que se queden con el fracaso y la decadencia".

"Si ustedes consideran como yo que hay algo profundamente injusto en este país, si ustedes ven como yo la impunidad y la injusticia, si quieren cambiar este sistema decadente a ustedes sí quiero pedirles que me acompañen con el voto", ofreció el candidato y pidió que la gente que no fue a votar acuda a las urnas el domingo para "ganar en primera vuelta".

En el escenario, toda la banda: Carolina Piparo, Victoria Villarruel, Diana Mondino, Marcela Pagano y hasta la polémica Lilia Lemoine. Desde la platea, una brillante Fátima Florez observaba toda la puesta en escena con una sonrisa de oreja a oreja que solo rompió para lanzarle besos al candidato más votado en las PASO y gritarle "Te amo".

"Probablemente hayamos pasado el desierto de los 40 años para llegar a la libertad", definió Milei comparando el regreso a la democracia con el tiempo que el pueblo judío pasó en el desierto después de liberarse de Egipto, de acuerdo al libro Éxodo de la Biblia.

"La política nunca fue mi vocación", admitió el economista, pero advirtió: "Los hechos demostraron que si los argentinos de bien no nos metemos, los políticos van a seguir arruinándonos la vida". Entre las personas a las que agradeció por hacer posible su éxito nombró al "Jefe", su hermana Karina Milei y a sus perros "Conan, Murray, Milton, Robert y Lucas, los mejores estrategas del mundo".

"Los que son pobres en el país libre están mejor que el 90% de la población del país reprimido, donde hay 25 veces de pobres en el formato estándar y 50 veces menos en el formato extremo y, como si fuera poco, la gente vive 20% más", enumeró Milei y le respondió a Carlos Melconian: "¿De qué salto al vacío me hablan? Es el salto al vacío de ustedes, chorros empobrecedores".

El diputado apuntó contra el partido de la candidata presidencial Patricia Bullrich: "A muchos, aún cuando quieran usar el rótulo de 'cambio', el cambio no les gusta. Tienen miedo y no están seguros de animarse a cambiar, solo lo hacen desde las formas".

Para el legislador, la dicotomía del próximo domingo es clara: "Los invito a preguntarse qué país quieren para sus hijos: el de la pobreza, la inseguridad, la inflación, la corrupción, la decadencia que hemos vivido durante décadas o alternativamente quieren el país de la libertad y la prosperidad que alguna vez supimos tener".