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Columnistas

La fabulosa Megan Rapinoe

Megan Rapinoe

El Mundial femenino de fútbol de Australia y Nueva Zelanda será el primero con 32 equipos justo cuando el masculino de Qatar fue el último con ese número. Argentina buscará su primer triunfo de la historia y también clasificar a octavos de final. Si prima la lógica su rival en la segunda ronda será Estados Unidos, vigentes bicampeonas mundiales. Un equipo que mixtura una gran camada de jóvenes con lideres como Alex Morgan o Megan Rapinoe, que anunció que a fin de año se retira. Militante LGBTIQ+, campeona olímpica, activista política, encabezó el reclamo salarial contra su federación y se enfrentó a Donald Trump. No solo se trata de una futbolista fuera de lo común, estamos en presencia de un ícono que trasciende lo que se ve en la cancha.

“Leyenda del equipo femenino de fútbol, Megan Rapinoe, anuncia que se retira al final de la temporada 2023 de la NWSL”. Así anunció la cuenta de Twitter del seleccionado femenino de Estados Unidos el retiro de su capitana tras más de 20 años como futbolista. El Mundial que arranca el 20 de julio marcará una disputa por el dominio global a nivel equipos y también entre las jugadoras. Están las veteranas como Rapinoe, su compañera Alex Morgan o la brasilera Marta, la generación intermedia donde brillan la española Alexia Putellas, vigente Balón de Oro, o la australiana Sam Kerr y las jóvenes como la alemana Lena Oberdorf, mejor futbolista joven de la Euro 2022, o la colombiana Linda Caicedo, jugadora del Real Madrid. Pero para Megan no habrá vuelta atrás y el tercer título al hilo sería un cierre de documental.

Nació el 8 de julio de 1985 en Redding, un pueblo de California al norte de San Francisco. En su biceps derecho lleva tatuado el contorno del estado que supo ser gobernado por Arnold Schwarzenegger. Tiene una hermana melliza, Rachael, y son las menores de los seis hijos de Jim y Denise. Cuando tenía tres años comenzó a jugar al fútbol de tanto ir a ver los partidos de su hermano Brian, cinco años mayor. Durante su infancia él era su ídolo, hasta que en 1995 todo cambió. Sus padres las sentaron y les dijeron: “Su hermano fue arrestado por llevar metanfetaminas al colegio”. Ese fue el inicio de un derrotero carcelario en el que Brian estuvo, entre ingresos y egresos, hasta 2017. Tuvo cargos por venta de drogas, tenencia de armas y manejar borracho. De joven incluso fue parte de una pandilla de supremacistas blancos dentro de la prisión y hasta se tatuó simbología nazi, que luego tapó.

“Nunca nada me rompió el corazón tanto como eso”, reconoció la jugadora en un perfil de su hermano que se publicó en la web de US Soccer durante el Mundial 2015, el primero que ganó. Allí Brian, que todavía cumplía su pena, destacaba el rol de su hermana en la crianza de su hjio Austin, de cómo hablaba de ella con otros reclusos y de la cantidad de fotos del seleccionado que tenía en su celda. En ese texto Rapinoe recuerda el esfuerzo de sus padres que trabajaban a contraturno para que siempre uno estuviese en la casa, se ocupaban de la situación legal de su hermano y no faltaban nunca a los partidos de Megan y Rachael, que compartieron equipo desde el jardín hasta la Universidad de Portland. Si bien su melliza llegó a jugar en el seleccionado Sub 23, una lesión en su rodilla la retiró del deporte de alto rendimiento. No así a ella que se rompió los cruzados dos veces antes de llegar a la liga femenina, las superó y explotó como jugadora.

Este será su cuarto Mundial y el palmarés no puede ser mejor: dos títulos y un segundo puesto. En Alemania 2011 fue vital en cuartos de final contra Brasil, porque perdían 2-1, se estaba jugando tiempo de adición en el segundo tiempo extra y sacó un centro perfecto desde la izquierda para que Amy Wambach convirtiera el empate de cabeza. Luego anotó su gol en la tanda de penales que Estados Unidos ganó. Su primer impacto había sido en la zona de grupos contra Colombia cuando anotó el primero de sus nueve goles en Copas del Mundo. Agarró un micrófono de ambiente pegado al arco colombiano y comenzó a cantar “Born in the USA” de Bruce Springsteen.

En la definición contra Japón comenzó de titular, pero fue cambiada a seis minutos del final del suplementario. Esta vez los penales favorecieron a las japonesas y ella nada puedo hacer. Sin embargo, se cobró revancha un año después en la final de los Juegos Olímpicos, también contra las asiáticas, cuando asistió a Carly Lloyd para el 2-1 definitivo que les dio la medalla de oro. En semifinales contra Canadá hizo historia al convertirse en la primera futbolista, mujer u hombre, que anotaba un gol olímpico en unos Juegos. Para no ser menos agrandó su record, el cual sigue teniendo en soledad, en 2021 en el partido por la medalla de bronce para la victoria 4-3 sobre Australia.

En 2015 ganó su primer título en una final sin equivalencias, otra vez contra Japón, donde a los 15 minutos ya ganaban 4-0 y cerraban con un 5-2 lapidario. Anotó dos goles en fase de grupos, dio una asistencia y fue parte del equipo ideal, que tuvo a seis estadounidenses entre las once. Sin embargo, su función de gala fue cuatro años después en Francia donde lideró a su selección al bicampeonato, fue la goleadora del torneo y elegida como la mejor jugadora. En su carrera acumula 199 partidos con Estados Unidos y 63 goles, dos a la Argentina y nueve de ellos en mundiales. Si anota tres o más, se meterá en el top five de goleadoras de la historia. Gracias a esa temporada ganó el Premio The Best y el Balón de Oro como la mejor futbolista de 2019.

En la víspera de ese torneo sacó a relucir otra de sus facetas, la de activista cuando le dijo a la revista Eight by eight que no aceptaría una invitación de Donald Trump si salían campeonas. "Gracias, pero no gracias. No voy a ir a la jodida Casa Blanca, no creo que seamos invitadas, lo dudo". El ex presidente recogió el guante y contestó. "Soy un gran fanático de la selección estadounidense y del futbol femenino, ¡pero Megan debería primero ganar antes de hablar! ¡Termina el trabajo!”. No solamente lo terminó sino que hizo uno de los dos goles en la final contra Países Bajos. Durante la campaña presidencial de 2020 apoyó a Joe Biden y hasta bromeó con ser su candidata a vicepresidente. El año pasado el demócrata le otorgó la Medalla Presidencial de la Libertad, el máximo galardón civil que entrega el estado por sus contribuciones. Se convirtió en la primera futbolista, mujer u hombre, que la recibió y se sumó a otros atletas como Michael Jordan, Kareem Abdul Jabbar o Arthur Ashe.

Parte de su rechazo a Trump fue el trato del republicano a inmigrantes, mujeres y homosexuales. Rapinoe en 2012 contó públicamente en la revista Out que era lesbiana y estaba en pareja con la jugadora australiana Sarah Walsh desde 2009. Luego se comprometió con la artista Sera Cahoone, con quien se iba a casar en 2015, pero se separaron antes. Desde 2016 está junto a Sue Bird, mítica basquetbolista de la WNBA, ganadora de cinco oros olímpicos. Desde hace varios años viven en Seattle donde ambas jugaban a sus deportes y fueron la primera pareja de mujeres que salieron juntas en la tapa de la revista de ESPN.

En 2019 encabezó el reclamo del seleccionado femenino por el “equal pay”, cobrar lo mismo que los hombres. Pedían un resarcimiento global de 63 millones de dólares, pero la justicia falló en su contra, aunque el año pasado la Federación acordó una compensación de 24 millones y comenzó a pagarles lo mismo que cobra el equipo masculino. Ya sea por una cuestión de justicia o de que no querían un problema de cara al Mundial 2026, lo cierto es que como pasa con Noruega, Dinamarca o Inglaterra, mujeres y hombres cobran lo mismo por representar a su país.

Amante del básquet, deporte que practicó y que le hubiera gustado jugar profesionalmente, tomó de Stephen Curry un mantra que la acompaña: “no queda nada por probar, queda todo por lograr”. Para alguien que ha ganado mucho, nada mejor que un nuevo Mundial por delante.

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