Noelia Magalí Fernández Leyes, quien era trabajadora de prensa en la organización política liderada por Emerenciano Sena y Marcela Acuña, aportó su teléfono celular a la investigación por la desaparición de Cecilia Strzyzowski.
Dentro del teléfono móvil había un video grabado por Fernández Leyes en el que aseguraba que no se iba a suicidar. La mujer filmó esto en el contexto del terror que atravesaba. Encapuchada y con la cámara enfocando solamente su cara para no dar indicios de su ubicación, la trabajadora de prensa es consciente de lo que ocurrió con Cecilia Strzyzowsk, pareja de Sena.
La mujer comienza el video asegurando que no quiere enterarse de nada de lo que se dice, sino que simplemente quiere aportar para que se esclarezca lo sucedido en el femicidio de Strzyzowski. ”Emocionalmente no estoy bien, mis hijos no están conmigo, están resguardados en otro lugar por cuestiones de seguridad. Son muy pocas las personas que saben dónde estoy. Mi única seguridad es un botón antipánico, una custodia permanente y otra para mis hijos”, indicó Fernández Leyes.
“No dejen a mis hijos solos, yo no puedo estar con ellos en este momento. Pero no me voy a suicidar, no me voy a matar”, remarcó y sentenció la mujer en el video. Fernández Leyes empezó a trabajar en el movimiento de Emerenciano Sena hace cuatro años por necesidad. La promesa era que le iban a dar vivienda.
Arrancó con un puesto de docente y empezó a escalar hasta llegar a la parte de prensa de la organización política. Su padre, Pablo Fernández, confesó: “Ella respondía a Patricia Acuña (hermana de Marcela) y su marido, Ricardo Goya. Cuando pasó lo de Cecilia, su jefa la llamó y le pidió que se ocupara del tema”.
Lógicamente, ocuparse significaba filtrarles información, querían que fuera a lugares a buscar información del caso. Debido a que Fernández Leyes se negó a esto, comenzó a ser maltratada. Finalmente, la mujer decidió resguardarse.
Cómo sigue el caso de Cecilia Strzyzowski
Cecilia Strzyzowski, una joven de 28 años, se la vio por última vez hace dos semanas, en el barrio 500 Viviendas, en el cordón suburbano de la ciudad de Resistencia, en Chaco. Ahí se despidió de su tía abuela y se subió a la camioneta de César Sena, padre de Emerenciano.
La familia de Cecilia denunció su desaparición ante la justicia y temió que haya sido asesinada. El viernes pasado, detuvieron a Emerenciano Sena y a su esposa, Marcela Acuña. La sospecha recaía en ellos: se presumía que César la había matado y ellos lo habían ayudado a esconder el cuerpo y a ocultar las pruebas.
Este miércoles se realizó una serie de allanamientos en un campo cercano a la propiedad de la familia Sena luego de la declaración indagatoria de su casero, Gustavo Melgarejo. El hombre declaró anoche ante el Equipo Fiscal Especial (EFE) integrado por los fiscales Jorge Gómez, Jorge Cáceres Olivera y Nelia Velázquez, y se presume que su testimonio complicó a los investigados.
El propio Melgarejo se configura como el sexto sospechoso y fue indagado como presunto coautor del delito de "homicidio agravado por el concurso premeditado de dos o más personas". Asimismo, hay una séptima persona de identidad reservada a la que también se indagó por el mismo crimen.
Este lunes, tras un rastrillaje, el fiscal Cáceres Olivera confirmó el hallazgo de restos óseos en un campo de la familia Sena. Además, tras otros dos allanamientos en propiedades de la familia ubicadas en Resistencia se encontraron restos hemáticos.
César Sena está detenido por ser el principal sospechoso de haber asesinado a su novia, Cecilia Strzyzowski, a quien todavía se sigue buscando. Esta mañana su abogado, Juan Díaz, anunció a la prensa chaqueña que se aparta del caso por tener “diferencias irreconciliables” con su ahora exdefendido.
"Hoy se juntaron elementos de prueba al expediente que me impiden seguir ejerciendo mi servicio por diferencias irreconciliables con la gente que represento. Tengo mis criterios, una ética profesional, por la que voy a renunciar. No sería eficaz mi defensa”, sostuvo el letrado en declaraciones a Radio Natagalá.
