Javier Ibarra había sido fiscal de la Unidad Especializada Antidrogas del Ministerio Público y también viceministro de Seguridad Interna de Paraguay. Fue encontrado muerto este viernes en su casa con dos impactos de bala en la cabeza, según reveló la autopsia.
El cuerpo sin vida del ex fiscal de Paraguay fue descubierto por una empleada en la cocina de su casa en la ciudad paraguaya de San Lorenzo. Los médicos forenses que realizaron la autopsia determinaron que Javier Ibarra había recibido dos tiros en la cabeza y no tenía ningún otro signo de violencia en su cuerpo.
Por su parte, el comisario César Silguero, jefe de Homicidios, aseguró en conferencia de prensa: “Nosotros siempre partimos de la peor hipótesis, por lo que, en este momento, lo investigamos como homicidio, antes de analizar otros elementos". Añadió que al parecer se trata de "balas del calibre 22 o similares" y que no había señales de forzamiento de las cerraduras.
Según trascendió, el ex viceministro había denunciado amenazas en el pasado, luego de dejar su cargo como fiscal. Por esta razón, buena parte de las conjeturas apuntan a un asesinato por encargo vinculado con el crimen organizado. Concretamente, en 2016, Ibarra había declarado que un grupo de desconocidos había forzado su vehículo para robarle tres armas de guerra pertenecientes a la Policía. Además, tras dejar su cargo, el ex fiscal de la Unidad antidrogas de Paraguay aseguró que estaba "en la mira" de grupos criminales.
Según Telesur, algunas hipótesis apuntan a una posible vinculación del asesinato de Ibarra con el de otro ex fiscal de Paraguay, Marcelo Pecci, a quien mataron a balazos en mayo mientras pasaba su luna de miel en Colombia. Pecci había sido fiscal especializado en narcotráfico y lavado de dinero. La policía capturó a los autores materiales del crimen, cinco sicarios que lo abordaron desde una moto de agua, pero todavía no pudo dar con los autores intelectuales.
