Un grupo de investigadores descubrió una nueva cepa del virus de la viruela del mono, llamado Mpox, en la República Democrática del Congo. Se trata de una "cepa mutante" con "potencial pandémico", por lo que las autoridades de salud se están movilizando con urgencia para contener su propagación.
El hallazgo se realizó en Kamituga, una ciudad minera de oro empobrecida y densamente poblada, al sur del Congo, donde se teme que las condiciones sean propicias para un brote explosivo. Hasta el momento se registraron 108 casos confirmados.
Según los estudios realizados, esta mutación del virus, llamada Clado 1b, se propaga con mucha facilidad entre los humanos, mucho más que otras cepas, y sobre todo mediante contacto sexual. Otra de sus características es que no es tan fácilmente detectable como otras cepas previas con los controles disponibles.
Los investigadores aseguran que este brote de viruela del mono puede "propagarse a nivel nacional e internacional" si no se establecen herramientas de control, ya que en un breve espacio de tiempo se detectaron 241 casos sospechosos y 108 confirmados.
"Los mineros y las trabajadoras sexuales viajan con frecuencia hacia y desde la ciudad para trabajar desde países vecinos como Ruanda y Burundi. Y muchas personas con síntomas de Mpox permanecen en la comunidad y no buscan atención", escribieron. Desde 2023 hasta el 29 de marzo de 2024, el país africano notificó un total de 18.922 casos sospechosos de MPXV, incluyendo 1.007 muertes.
A finales del 2023, la Organización Mundial de la Salud (OMS) emitió una preocupante advertencia sobre el crecimiento del brote de viruela del mono a nivel global: desde el 1 de enero de 2022 hasta el 11 de septiembre de 2023, se habían confirmado 90.439 casos en 115 países de todas las regiones. Además, se registraron 157 muertes relacionadas con esta enfermedad.
