Las autoridades de la universidad de Río Negro y Neuquén aclararon que "técnicamente" no están en esta situación, pero que si Nación no restituye las transferencias en el corto plazo no podrán pagar los servicios.

Solo era cuestión de tiempo. No iba a pasar mucho hasta que las autoridades de alguna de las universidades públicas que hay en todo el país advierta que, de seguir con este modelo de (no) financiamiento, no llegarían a poder cumplir con sus obligaciones.

Durante el fin de semana el alerta se volvió a encender cuando la agrupación de estudiantes, docentes y no docentes "Defendamos la UNCo" informó que la Universidad Nacional del Comahue (UNCo) entró en cesación de pagos y pidió: "Por favor, no miremos para otro lado. No seamos parte de la generación que deje morir a la Universidad Pública". Ante la decisión del Gobierno de pisar las transferencias a las casas de altos de estudios, las instituciones están teniendo que recurrir a medidas extremas y recortar servicios básicos como la limpieza o la telefonía.

"Nosotros, como gran parte del sistema universitario nacional, veníamos advirtiendo que el congelamiento del presupuesto universitario iba a tener un dramático momento, justamente llegando a marzo y abril. Esto se está presentando, ya que los gastos de funcionamiento, que están congelados a enero del 2023, no nos están permitiendo hacer frente al pago de servicios", explicó la rectora de la UNCo, Beatriz Gentile en diálogo con AM750.

"Este mes tenemos que ver qué recortes hacer y qué cosas no podemos pagar" dijo Gentile y detalló: "El servicio, por ejemplo, de luz, de agua, de telefonía celular hoy no lo estamos pudiendo pagar si no aparece el refuerzo presupuestario que se anunció pero que todavía no fue acreditado. Hay algunos servicios que tenemos que sentarnos con los proveedores para ver de qué manera hacer un plan de pago, pero hoy no los podríamos pagar".

En las universidades advierten que tienen congelados los gastos de funcionamiento a valores de enero del 2023, y en el caso de la UNCo dicen que todavía no recibieron el 70% de aumento que anunció el gobierno de Milei

La rectora explicó que el gasto de funcionamiento en una universidad se usa para el pago de alquileres de edificios para aulas, becas de estudiantes, de investigación y el pago de servicios. "Nuestra universidad está en dos provincias, en más de 10 localidades, por lo que nuestros proveedores son distintos -señaló-. Así como las tazas municipales y el impuesto inmobiliario”.