Salir de vacaciones es cada vez más caro. Entre hotel, nafta y comida, una familia tipo puede necesitar cifras millonarias para irse una semana a un destino turístico. En ese contexto aparecen alternativas como Uribelarrea, un pueblo a 1 hora de Buenos Aires que es ideal para una escapada de fin de semana este verano. ¿Qué podés hacer ahí?
Los precios de alquileres de hoteles y casas en la costa atlántica están por las nubes. Vacacionar en Mar del Plata puede salir 1000 dólares (es decir, un millón de pesos) solo en alojamiento, por lo que habría que gastar cerca de 3 millones para irse solo una semana en familia a la costa.
Por suerte existen alternativas mucho más económicas para descansar del caos de la ciudad. Una de ellas es Uribelarrea, un pueblo ubicado a menos de 100 kilómetros de Buenos Aires, que puede ser la solución para una escapada de fin de semana sin pagar una fortuna.
Qué podés hacer en Uribelarrea, el destino ideal para una escapada de verano
Si bien es un pueblo pequeño, Uribelarrea -ubicado en el partido de Cañuelas, provincia de Buenos Aires- tiene una importante variedad de cosas para hacer. Destacado por su gastronomía, este lugar ofrece planes en torno a la comida y bebida: una feria, un viñedo y varios restaurantes.
- Finca Don Atilio: se trata del viñedo más cerca de Buenos Aires. Allí, la cepa insignia es el Tannat y el lugar forma parte del llamado Camino del Vino, que tiene como punto central a la provincia de Mendoza.
- Feria de artesanos y emprendedores: los sábados y domingos, en la plaza principal (frente al Santuario Nuestra Señora de Luján) es posible comprar tanto artesanías como productos caseros, desde salame y queso hasta pancitos saborizados.
- Restaurante "El Palenque": si bien no es el único restaurante que puede visitarse en Uribelarrea, sí es el más tradicional. Está ubicado en una construcción histórica del pueblo (que data de 1890) y sus especialidades son las empanadas fritas, las carnes a la parrilla, las pastas caseras, y las tablas de quesos, fiambres y encurtidos.
