Después del segundo debate presidencial, Patricia Bullrich contó que su prima Fabiana Cantilo le hizo “un trabajo” para curarla del “mal de ojo” que la propia cantante le había diagnosticado. Sin embargo, tras la repercusión que tuvo la anécdota, la artista consideró necesario aclarar que su aporte al bienestar de la candidata no tuvo ninguna intencionalidad política.

“Quiero contarles algo chicos: resulta que, en general, hago servicio con la gente que me rodea y no pertenezco a ningún partido político. Hago servicio con la gente que me parece que necesita ayuda. Quiero que eso quede claro”, dijo Cantilo en una historia que compartió en su cuenta de Instagram.

En este sentido, agregó que esa persona "puede ser de cualquier parte, de cualquier clase social, de cualquier partido. Puede ser de mi familia o no, lo hago con el fin de ayudar a la gente que me parece que se lo merece o lo necesita". Y citó a Fito Páez para cerrar, antes de agregar una particular frase: "Yo no pertenezco a ningún ismo. Yo soy fan de Jesús, de Buda y de Narcóticos Anónimos".

La aclaración de la cantante tiene que ver con una declaración que Bullrich tuvo la semana pasada sobre Fabiana Cantilo, cuando la candidata de Juntos por el Cambio analizó su performance en los dos debates presidenciales que tuvieron lugar en la Universidad Nacional de Santiago del Estero (UNSE) y en la Facultad de Derecho de la Universidad de Buenos Aires (UBA).

“En el primero estaba destruida, parecía tarada. Tomaba agua y se me secaba la boca, se me paralizaba la lengua. Decía: ‘La gente va a pensar que soy estúpida’. Después me vi y me la banqué bastante bien. Y en el segundo fui con el hacha a decir las cosas de frente”, recordó y luego detalló la particular conversación con su prima: “Me llamó Fabi y me dijo ‘aunque usted no crea está ojeada. Yo sé que no cree nada, pero le estoy haciendo un trabajo’. Y ahora el ojo lo tengo bien, así que me hizo un buen trabajo Fabi”.