El segundo período de Darío Benedetto, desde que volvió en 2022, no ha tenido nada que ver con el primero y no ha estado a la altura de lo que los hinchas esperan de él. Por eso no ha logrado afirmarse como titular y ha desaprovechado múltiples oportunidades con errores graves, como el penal ante Corinthians o la pelea con Racing.
Ayer en Junín, después de mucho tiempo, ingresó como titular contra Sarmiento y sumó otra jornada para el olvido. Después de un partido opaco, en los últimos minutos, erró un penal que hubiese significado el empate y terminó muy sacado. El delantero pateó fuerte y al medio, lo que posibilitó que José Devecchi atajara el remate sin siquiera dar rebote.
Con el pitazo final, vino la peor versión de Benedetto: le quiso pegar a Nahuel Gallardo, el hijo del Muñeco, que le esquivó una trompada y luego agredió al árbitro.
En el tumulto, el árbitro Silvio Trucco expulsó a Nahuel Gallardo y a Lucas Blondel. Cuando varios futbolistas de Boca se acercaron al juez para reclamarle por su actuación, Benedetto los separó y le dijo a Javi García en referencia al árbitro: “Es limitado”.
Tras el encuentro, el delantero no quiso hablar con la prensa y se retiró cabizbajo con todo el plantel. Quien sí comentó los hechos fue Gallardo, que todavía no entiende qué le pasó a su colega. “Termina el partido y lo quiero saludar a (Lucas) Blondel de buena manera. Me niega el saludo, sigo caminando. Pasaron cosas que quedan en la cancha y Benedetto se metió de la nada y me vino a tirar una piña, no sé por qué. Se ve que estaba caliente del penal. Y ahí se armó todo el tumulto”, comenzó Gallardo.
Benedetto se metió de la nada y me vino a tirar una piña, no sé por qué. Se ve que estaba caliente del penal.
En medio de los empujones, Silvio Trucco, árbitro del partido, le mostró la roja y Gallardo contó: “Silvio no había visto nada y empieza a repartir tarjetas. Pero no había pasado nada, hasta que Benedetto se metió a hacer quilombo".