Israel lanzó un ataque aéreo y terrestre sobre la ciudad de Jenin, ubicada en la Cisjordania ocupada. Es la operación militar en territorio palestino más importante en años, y fue anunciada por Israel como "un extenso esfuerzo antiterrorista".
Al menos ocho palestinos perdieron la vida y 50 salieron heridos, 10 de ellos seriamente. El ataque comenzó a la 1 de la mañana del lunes y, según el Ministerio de Salud palestino, se espera que la cantidad de muertos aumente. En la tarde del lunes, fuentes israelíes sugirieron que se necesitarán al menos otras 24 horas para completar la operación.
Luego de lanzar diez ataques de drones contra edificios, una brigada de tropas israelíes, de entre 1.000 y 2.000 soldados, ingresó a la ciudad con el apoyo de bulldozers blindadas y francotiradores ubicados en edificios. Rapidamente se encontraron con una resistencia armada por parte de grupos palestinos. Antes de comenzar el ataque, Israel informó a la Casa Blanca de sus intenciones.
Las calles de Jenin estaban desiertas este lunes excepto por los grupos que se reunieron en el hospital más cercano, mirando las batallas en la entrada del campamento y al final de la calle. El humo negro de llantas quemadas y gas lacrimógeno llenaba el aire, mientras las ambulancias buscaban la forma de atender a los heridos. Mientras tanto, las mezquitas emitían llamados al combate desde sus parlantes.
Desde la Casa Blanca afirmaron que defienden el derecho de Israel a la seguridad y explicaron que están monitoreando la situación en Cisjordania desde cerca. Un vocero presidencial expresó: "Apoyamos el derecho israelí a la seguridad y a defender a su pueblo de Hamas, la Jihad Islámica Palestina y otros grupos terroristas".
El primer ministro británico, Rishi Sunak, por su parte, llamó a las fuerzas israelíes a mantener la moderación y priorizar la protección de los civiles. Además, llamó a todos los participantes en el conflicto a no escalar la situación en Gaza ni Cisjordania.
Mientras tanto, un vocero del presidente palestino, Mahmoud Abbas, expresó que la operación es "un nuevo crimen de guerra contra nuestra pueblo indefenso". Hamas, en cambio, convocó a todos los jóvenes de Cisjordania a unirse a la lucha.
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