En año electoral, María Eugenia Vidal no se baja de la carrera presidencial y expresó, nuevamente, su deseo de sentarse en el sillón de Rivadavia. Y, por ende, postularse en la interna de Juntos por el Cambio, que ya tiene a Patricia Bullrich y Horacio Rodríguez Larreta como principales candidatos.
En este sentido, la diputada reconoció que su ciclo en la ciudad de Buenos Aires se agotó. Y agregó que cumplió un ciclo en la Ciudad, cumplió un ciclo en la provincia, y hay nuevos líderes en ambos distritos que han crecido mucho.
“Hoy puedo darle mucho más al proceso de transformación a nivel nacional. A mí me gustaría ser presidenta, pero no estoy desesperada por ocupar un cargo”, sostuvo, en una entrevista que le concedió a Infobae.
En este contexto, en caso de que gane las elecciones, aseguró que no la intimidan ni Moyano ni Baradel. “Yo estuve en la Provincia de Buenos Aires, me enfrenté con cosas peores, me enfrenté con el Pata Medina, me enfrenté con narcos, me enfrenté con barras bravas. Di peleas que nunca antes se habían dado y estoy dispuesta a volver a darlas”, aseveró Vidal.
Vidal apuntó contra el Kirchnerismo
En otro pasaje de la entrevista, la exgobernadora de la Provincia de Buenos Aires disparó contra La Cámpora y afirmó que es parte de un ciclo que se está agotando, que es el ciclo del kirchnerismo. En este sentido, añadió que la Argentina no quiere más esta cultura oscura del poder, no quiere más la cultura de la intimidación, de la amenaza, de utilizar herramientas ilegales para perseguir al que piensa distinto. “Esa Argentina se está agotando, está llegando al final. Y La Cámpora es parte del final”, opinó.
Finalmente, dijo que al pedido de juicio político, de Alberto Fernández, a la Corte Suprema lo ve como el último manotazo de ahogado para defender la impunidad. “Buscan atacar la independencia de Poderes para intimidar a los jueces que tienen que fallar sobre las causas de corrupción del kirchnerismo”, concluyó.