El expresidente Mauricio Macri criticó al gobierno por la decisión de decretar Feriado Nacional el día de la llegada de los jugadores de la selección al país. El dirigente de Juntos por el Cambio consideró que la decisión fue una falta a "la libertad”.

“Ellos no creen en la libertad”, aseguró Mauricio Macri en una entrevista realizada anoche en TN, después de responder que el feriado le parece “poco feliz”. En esta línea, el exmandatario consideró a la decisión como una especie de obligación a quedarse sin trabajar, y dio por hecho que todo el mundo podría haberse acercado a la caravana aunque tuviera que ir al trabajo: “Todos íbamos a ir a festejar de alguna manera, en algún lugar íbamos a encontrar el colectivo y la caravana, ¿por qué tienen que obligar a mucha gente que necesita trabajar que se quede sin poder trabajar?”

¿Y los jujeños? ¿Y los catamarqueños? ¿Y los neuquinos? Ellos no pueden venir a la 9 de Julio, lo van a ver por televisión un rato, ¿No podían hacerlo trabajando?

Después de esas declaraciones, el empresario jugó la carta del federalismo: “¿Y los jujeños? ¿Y los catamarqueños? ¿Y los neuquinos? Ellos no pueden venir a la 9 de Julio, lo van a ver por televisión un rato, ¿No podían hacerlo trabajando? ¿Por qué no los respetan?”

Para Mauricio Macri, que se prepara para la carrera electoral del 2023, la decisión del gobierno de decretar feriado constituye uno de los motivos por los cuales “la mayoría de los argentinos” rechaza al oficialismo. “Queremos ser libres, queremos que nos saquen la pata de encima”, afirmó.

Además, expresó un mal pronóstico para la recibida de la selección en los distintos puntos de su recorrido. “Espero que se apoyen en la ciudad para organizarlo, porque si se organizan ellos como hicieron en el funeral de Diego va a ser una catástrofe esto”, manifestó.

Finalmente, Macri volvió a cargar contra la gestión actual y lanzó nuevos halagos hacia Europa al asegurar que “los jugadores todos viven en el exterior” porque “culturalmente ven qué significa vivir en una sociedad en libertad, de respeto”.

Para el dirigente del PRO, esto se debe a “la decadencia de nuestro país”, contra lo cual prometió aspirar a que para el Mundial de 2030 “ya tengamos más de la mitad del equipo jugando en la Argentina porque habremos reordenado el fútbol argentino, reordenado la Argentina y los buenos jugadores no se van a ir tan rápido”.