El ministro de Economía, Sergio Massa, recibió al cotitular de la Confederación General del Trabajo (CGT) Pablo Moyano, uno de los dirigentes que apoyó su designación. Pero dejó claro que su apoyo no es incondicional.
Hace dos semanas el ministro se reunió con los rivales de Moyano en la CGT, los cotitulares cegetistas Héctor Daer y Carlos Acuña y los dirigentes Andrés Rodríguez, Gerardo Martínez y José Luis Lingeri. Así que para equilibrar los gestos hacia el sector gremial también se reunió hoy con Moyano.
El sindicalista pidió “esfuerzos para bajar la inflación”, la universalización de las asignaciones familiares y el otorgamiento de un aumento de suma fija para los trabajadores de menores ingresos. Massa si bien los escuchó, no se comprometió a cumplir con ninguno de sus pedidos.
El encuentro no solo sirvió para mantener en equilibrio los gestos del Ministerio de Economía, Producción y Agricultura, sino también para descomprimir la tensión luego de que el hijo de Hugo Moyano calificara de "inútil" al secretario de Comercio, Matías Tombolini. El secretario había afirmado que “la inflación es una cuestión de percepción”.
Massa si bien los escuchó, no se comprometió a cumplir con ninguno de sus pedidos.
Por su parte, Sergio Massa explicó detalles de su política económica y de las tratativas que desarrollará la semana próxima en los Estados Unidos. Se reunirá con autoridades del FMI, el Banco Mundial, el BID y del Tesoro norteamericano.
Otra demanda de Moyano fue la actualización del piso a partir del cual los trabajadores en relación de dependencia pagan el Impuesto a las Ganancias. Porque impacta en forma negativa en los sueldos de trabajadores de mejores ingresos.
Durante la reunión el ministro de limitó a tomar nota, luego llamó a la CGT para proponer la devolución de 21 millones de pesos a las obras sociales hasta fines de año que están retenidos en el Estado. Inyectaría 5.250 millones de pesos por mes, entre septiembre y diciembre, al Fondo Solidario de Redistribución (FSR).
Además, Massa propondrá que se incorpore en el Presupuesto 2023 una partida especial para que las prestaciones por discapacidad sean financiadas por el Estado.
No es la propuesta que esperaba la CGT, los dirigentes aseguran que servirá para "salir del ahogo".
