El periodista Hernán Casciari pasó por Día de Tregua con Carolina Amoroso y comentó sobre sus comienzos como escritor. "La primera vez que cobré plata con el periodismo fue a los 13 años en el diario de mi pueblo", relató.

“Podría haber elegido abogacía y hubiera sido mucho más peligroso. Te juro que puedo sacar a cualquiera de la cárcel. De todas esas variantes, elegí la menos peligrosa que fue contar cuentos”, sostuvo Casciari.

El creador de Orsai explicó que es una persona que cuenta historias sin importar el formato. “Esa es la característica principal de la cuestión: maquillar, editar una anécdota. Estás editando la historia cuando vas a hablar con alguien en un boliche o buscar un aumento en el trabajo”, agregó.

A mi me gustaba que dos personas me leyeran en 'internet': mi amigo Chiri y mi viejo que no había agarrado un libro nunca

“El mejor consejo para las personas que escriben y sospechan que no es bueno es que tiene que escribir 10 mil páginas malas para descubrir tu verdadera voz. Y tuviste todo ese background para soltar la mano. Por suerte fui muy tempranero en el oficio de ser mal escritor. No sabes la cantidad de cosas que escribí. Lo único que me importaba era cuantas hojas escritas llevaba. Estoy orgulloso de ese chico de 14 años”, declaró.

Además, el periodista expresó que todos tienen una variedad de personajes porque no sos la misma persona ni utilizas la misma voz con una persona que estás enamorada, con un jefe o con un compañero de laburo.

El escritor contó la primera vez que cobró plata con el periodismo: “Fue a los 13 años en el diario de mi pueblo, en Mercedes, provincia de Buenos Aires. A mi me gusta leer todo y trataba de escribir historias mías en la máquina de escribir de mi padre. Él era muy amigo del director de un diario del pueblo y me ofreció un puesto como cronista de básquet interzonal. Los viernes iba a ver los partidos y anotaba las mejores jugadas”.

El periodista declaró que, al llegar a España, se dio cuenta que no iba a poder escribir para españoles. “A mi me gustaba que dos personas me leyeran en 'internet': mi amigo Chiri y mi viejo que no había agarrado un libro nunca. Pensaba cómo lo iban a recibir cuando publicaba el cuento. Tenía que escribir algo intelectual para que Chiri no se aburriera, pero no tan complejo para mi viejo y se diviertan los dos targets”, manifestó.

Por otro lado, Casciari reveló que, cuando su papá murió en el 2008, el hijo del director de ese diario le contó que su padre le daba la plata a mi jefe y con eso me pagaba. “Él quería que no se convirtiera en un hobby. Fue una de las mejores enseñanzas silenciosas que me dio", dijo.

“Como todos los chicos del interior estas desde los 12 esperando cuándo se termina esto. En el pueblo estábamos ensayando y sabíamos que un día nos íbamos a ir a Buenos Aires. Suele pasar eso con las pequeñas juventudes. No esperábamos tanto -relató- Con mi amigo Chiri tuvimos buena suerte. Teníamos que conseguir historias. Estuvimos muy despiertos en esto y eso fue una cosa a favor que tuvimos. Estuvimos al borde de la merca, pero no caímos a ningún precipicio”.