Manuel Adorni dijo que el Gobierno entiende que la central sindical no convocará a un paro nacional.

Después de la reunión que compartió la cúpula de la CGT con la del Gobierno, el vocero presidencial desestimó la idea de que la central sindical convoque a un paro general como se especulaba. "Entendemos que el paro de la CGT no va a existir. Al menos en los plazos en que estaba previsto", expresó esta mañana en su habitual conferencia de prensa, Manuel Adorni.

Tanto el Gobierno como los sindicalistas calificaron el encuentro, en el que se profundizó sobre la "modernización" de las leyes laborales, como "positivo". También dejaron trascender que planean conformar una mesa de diálogo que se reúna con frecuencia. Sin embargo no se habló de la medida de fuerza con la que venía amenazando la CGT para el 1ero de mayo.

"La reunión efectivamente fue en buenos términos y quedó determinado que el canal de diálogo está abierto. Fue una reunión positiva porque todos entendemos la situación crítica de la Argentina y la responsabilidad sindical entiendo que está garantizada", insistió Adorni.

Entre los trascendidos de lo que sucedió en la reunión, pudo reconstruirse que los sindicalistas estarían de acuerdo en acompañar una reforma laboral, siempre y cuando sea una versión "light". En la misma se debería evitar eliminar la cuota sindical, que no se restrinja el financiamiento de las obras sociales ni que se limite el derecho a huelga. Pero sí que propicie una ampliación del período de prueba antes de que un trabajador quede en condición de efectivo en relación de dependencia.

Horas antes de que los referentes vayan a la Casa Rosada, la CGT publicó un documento que llamó Agenda para un Nuevo Contrato Social, que luego elevó al Gobierno nacional en la reunión que compartieron con el ministro del Interior, Guillermo Francos, el jefe de Gabinete, Nicolás Posse, y el asesor presidencial Santiago Caputo.