Un chico de 12 años mató a tiros a un compañero y otros dos resultaron gravemente heridos en una importante escuela primaria ubicada en la ciudad de Vantaa, a las afueras de la capital de Finlandia, Helsinki. Uno de los chicos heridos murió en el acto y los otros dos estaban heridos de gravedad y fueron trasladados de inmediato al hospital.
Al igual que en casi todo el mundo, las escuelas volvían a abrir sus puertas después del fin de semana largo por las Pascuas, pero en esta región de Finlandia se dio de la peor manera. El sospechoso escapó tras el crimen, pero finalmente fue detenido "con calma" pocos minutos después y con el arma todavía en su poder, que estaba registrada a nombre de un familiar del sospechoso.
Según comentaron los padres de los niños que asisten a la escuela en declaraciones a los medios de comunicación finlandeses, el tiroteo se había producido dentro de un aula, y dijeron que habían hablado con sus hijos por teléfono, aunque no se conocían todavía los motivos.
El caso ahora se investiga como un asesinato y doble intento de asesinato. Los chicos menores de 15 años no tienen responsabilidad penal en Finlandia, por lo que el sospechoso no fue puesto bajo custodia y estará bajo el cuidado de los servicios sociales después de un nuevo interrogatorio.
Se entiende que el arma con licencia de un pariente cercano. La posesión de armas está muy extendida en Finlandia y los niños mayores de 15 años pueden tener licencias para utilizar armas de fuego de otras personas.
El Primer Ministro de Finlandia, Petteri Orpo, describió el tiroteo como profundamente perturbador y dijo que era evidente que muchos jóvenes luchaban con su salud mental y que "se deben poder abordar estos problemas lo antes posible". El miércoles habrá un día de luto en Finlandia.
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