Tras una inflación de 20,6% el último mes, el consumo en enero fue un 3,8% más bajo comparándolo con el mismo mes del año anterior. De esta manera se terminó una curva positiva que se venía manteniendo continuamente desde mayo de 2023, según datos de la empresa consultora Scentia.
Tras un 296,6% de aumento de precios interanual, el consumo de enero se vio afectado. Este número se mantuvo incluso sobre la inflación general, que fue del 254,% según el INDEC. En lo que respecta a productos empaquetados, cayeron todas las categorías, menos aquellos productos exhibidos en la línea de cajas para tentar a los consumidores.
El presidente de Scentia, Osvaldo del Río, dijo que “si bien este resultado de la caída mensual era esperable, llamó la atención el comportamiento diferente entre canales dado que, luego de 18 meses a la baja, el canal de los autoservicios logró un comportamiento levemente positivo del 0,5%. Mientras que los supermercados, que durante más de dos años arrojaron indicadores positivos, sufrieron un retroceso en sus ventas del 8,3%”.
Además, agregó que “es importante tener en consideración que las bases de comparación son parte de la explicación de esta situación, dado que los autoservicios se comparan con un -9,1% de enero 2023 y los supermercados con +7,8%. Sin embargo, hay otros componentes que suman a esta nueva etapa, por ejemplo, los fuertes cambios en precios y la pérdida de poder adquisitivo”.
Otro factor no menor que impactó en estos números tienen que ver que los autoservicios crecieron en el AMBA pero retrocedieron en el interior del país. “Posiblemente encontremos la explicación a este tema en un menor éxodo turístico, que siempre es de ayuda para este canal en esta época del año", dijo Del Río. Y sumó: "Otro aspecto a considerar es la posible caída en las ventas de ciudades fronterizas, que tenían un impacto importante en el interior y ya no son tan atractivas con las condiciones actuales”.
Por otro lado, en un contexto de inflación alta y sueldos que no acompañan, "es probable que también se intensifiquen hábitos que ya hemos visto, con una mayor frecuencia de compra y menor cantidad de unidades por ticket, con el fin de cuidar más el gasto en cada acto de compra”, señaló.
Según explicó en un comunicado la Cámara Argentina de Comercio (CAC), la capacidad de consumo de los argentinos seguirá su tendencia a la baja porque “el nuevo Gobierno ha ido disminuyendo el ritmo de alza de las asignaciones y subsidios a las familias”.
En el mismo documento, la CAC explicó que “las elevadas tasas de inflación impactaron en el poder de compra y no hubo adelanto posible de las mismas que sostuvieran con signo positivo el índice de consumo como había sucedido en diciembre, por lo cual enero 2024 volvió a mostrar signo negativo”.
