Un hombre cubierto con un casco trató de disparar contra los clientes y el personal de un bar en la zona Norte de Rosario este miércoles por la noche. Afortunadamente, las balas no salieron y el delincuente huyó con su cómplice, y por el momento se desconoce su identidad y en qué dirección escapó.
Alrededor de las 20:43 de este miércoles, en bulevar Rondeau al 3900, Rosario, algunas personas que comían o tomaban algo en un negocio gastronómico llamado Rondó Bar vivieron un momento terrorífico. Mientras circulaban varios peatones y autos por la zona, un hombre trató de balear a los clientes que se habían sentado en las mesas de afuera y todo quedó grabado por las cámaras de seguridad.
La secuencia puede reconstruirse en buena parte a partir de lo que registraron las cámaras. Dos personas llegaron a la altura del bar en una moto de alta cilindrada, cuya marca no fue identificada. Al rato, uno de ellos, con el casco puesto, pantalón y zapatillas oscuros y una campera violeta, blanca y negra, se acercó a la zona donde estaban los clientes.
Abriéndose paso entre las sillas, dejó algo sobre una mesa en la que había dos hombres sentados y uno de pie conversando, retrocedió unos pasos y sacó un arma, luego de lo cual gatilló varias veces. Tanto las personas contra las que apuntó el atacante como las de las otras mesas salieron corriendo en las direcciones que pudieron y, ante su intento fallido, el agresor huyó rápidamente.
A continuación, las imágenes muestran cómo uno de los hombres a los que el atacante intentó balear vuelve corriendo con un palo para perseguirlo, pero la corrida fracasó y el delincuente consiguió escapar en la moto. Más tarde, se comprobó que el objeto que dejó antes de tratar de disparar era un cartón con un mensaje poco preciso y mal escrito: “Para los pre de alto quemos vicita”. Lo acompañaban el dibujo de una cara feliz y el número 137 al costado derecho.
Al rato, tras un llamado al 911 de uno de los mozos, un patrullero llegó al lugar. Los agentes del destacamento 23 de La Florida tomaron testimonios y derivaron el caso a la Policía de Investigaciones (PDI) y al a Fiscalía de turno, que investigará la causa bajo la carátula de “amenaza calificada”.
Más Información
