Las tropas de asalto del Departamento Unidad de Investigación Antiterrorista de la Policía Federal ingresaron a la casa del adolescente sospechado de haber realizado una amenaza de bomba a las embajadas de Estados Unidos e Israel. El chico de 18 años aún está cubierto por la obra social de su padre, empleado de una empresa de plásticos.
Además, se le secuestraron computadoras y pendrives que serán analizados. El papá del adolescente estaba en el lugar mientras le leían la imputación en su contra. El chico había amenazado a las embajadas a través de un mail, con una dirección de correo que incluía su propio nombre. Por esta razón fue fácil identificarlo.
La amenaza, tanto a la embajada de Israel y Estados Unidos, se llevó a cabo el miércoles. El texto con el que se envió tiene un tono notoriamente antisemita, cargado de insultos a la colectividad judía en medio de la guerra contra Hamas. "BOMBAAAAAAAAAAA", envió el joven adjuntando una fotografía adulterada del embajador Marc Stanley.
También hizo otra masiva a la Embajada de Canadá. Lee Pvse Un4 boMb444 Enn Tagle 2828 (C1425EEH) Ciudad Autónoma de Buenos Aires. BOMBAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAA. C0GeRee Y M4TAREE4 4 T0D0ZZ", señaló. Horas más tarde hizo lo mismo con la Embajada de los Emiratos Árabes: "MvertE A L0S P4GANOS. LEE PVSE UN4 boMB444 Enn Mariscal Antonio José de Sucre 3825".
Incluso, a esta última le adjuntó una foto genérica de un montón de explosivos. Casi al mismo tiempo le envió un texto similar a la Embajada de Irán. Sin embargo, lejos de ser un chiste, esto preocupa ya que cada vez hay más antecedentes de este tipo en la Argentina.
Antecedentes de amenazas de bomba en Argentina
En los últimos años se recopilaron cada vez más casos de amenazas de bomba en la Argentina. Desde el Conurbano hasta Santiago del Estero, allanados por la Unidad de Investigación Antiterrorista. Apenas superan los 25 años, y en su mayoría reivindican, en cierta forma, algunos aspectos del nazismo.
Generalmente hablan de salir a matar, marcados por la soledad y la alienación. Usan términos como “incel”, que marca el celibato involuntario, un término ligado a discursos de misoginia extrema. Por este motivo, el FBI los denuncia con frecuencia. Lejos de vivir en cuevas nazis, los amenazantes se encuentran en la casa de sus padres, en las que poseen literatura prohibida y armas pesadas.