Más de 10 mil años de agricultura combatiendo las malezas y, sin embargo, en cada barbecho y en cada cultivo se presentan nuevos desafíos, como puede ser las nuevas resistencias.
Si bien los grandes desarrollos asociados al control de malezas han contribuido a disminuir su impacto, la dinámica del problema, fundada en la capacidad de adaptación de las especies vegetales, sigue siendo un desafío permanente para los productores y las empresas.
Allí, se despierta el interés científico por explicar los procesos que gobiernan esa adaptación y sentar las bases para la aplicación de la tecnología. La innovación contribuye al diseño de las estrategias de manejo, procurando asegurar una producción creciente y respetuosa del ambiente y de las demandas sociales.
Por estos motivos y, bajo el lema "Ciencia, producción y sociedad: hacia un manejo sustentable", comenzó en Mar del Plata el IV Congreso Argentino de Malezas – Asacim, encuentro que refleja la integración de la academia, la industria y la producción como base para contribuir a sistemas agropecuarios que garanticen compatibilizar la generación creciente de alimentos con el menor impacto ambiental y social.
El evento se lleva a cabo entre hoy y mañana en el Hotel Sheraton, donde pasarán por el estrado profesionales de EE.UU., Brasil y la Argentina, ante un público donde también se encuentran técnicos, empresarios, estudiantes de Uruguay, Colombia, Bolivia y Paraguay, con más de 72 exposiciones para presenciar y aprender.
Adaptarse a las malezas y la resistencia de las malezas
La acción de las malezas, así como la evolución biológica de resistencias, requiere el constante esfuerzo e innovación de las empresas para desarrollar nuevos productos que den resultados y, a su vez, esto genera que los productores requieran una constante actualización a fin de no perder terreno contra las malezas, ni rentabilidad.
Por esto, en las exposiciones, conferencias y mesas redondas los ejes temáticas son: Resistencia a herbicidas, Manejo de malezas con herbicidas y tecnología de aplicación, Manejo integrado de malezas, Biología y ecología de malezas, Ambiente, sociedad, extensión y educación de las ciencias de las malezas.
El primer expositor de la jornada fue el brasileño Luis Antonio De Ávila de Mississippi State University, quien disertó sobre "Cambio climático, la biología y manejo de malezas".
Uno de los conceptos fuertes que dejó en su exposición fue que "el Cambio Climático va afectar el crecimiento y desarrollo de las malezas y que hoy ya está afectando la eficacia y selectividad de los herbicidas".
A través de los estudios desarrollados y presentados llegó a la conclusión de la necesidad de "adaptar el sistema de cultivos a la misma velocidad que crecen y se desarrollan las malezas, con la creación de tácticas que sea resilientes. Vamos a tener más malezas en el futuro especialmente en siembra directa con mayor resistencia a los herbicidas. Es difícil diseñar un experimento sobre la hipótesis de que las malezas están aprendiendo a metabolizar los herbicidas, debido a su rápida evolución", indicó durante el Congreso.
Nuevas moléculas anti-resistencia
En dicho marco BASF aprovechó la oportunidad para presentar Voraxor, un herbicida para el manejo de barbecho y para posible uso en cultivos como soja, maíz, trigo y cebada.
Según indicaron desde la empresa, ofrece un "contundente y rápido control de malezas y un excelente efecto de persistencia sobre las malezas de hoja ancha aún no emergidas. Al mismo tiempo, puede ser complementario y compatible con otros productos y por su excelente selectividad, se puede aplicar hasta el día de la siembra".
Se espera que estará disponible próximamente para los productores argentinos y "su innovación radica en que funciona inhibiendo la enzima Protoporfirinógeno oxidasa (PPO), lo que altera la producción de clorofila de las plantas. Asimismo, utiliza un sitio de acción novedoso para un control óptimo de malezas de hoja ancha, incluyendo las más resistentes, que generan importantes problemas para los agricultores", finalizaron.
