Tras el pedido del padre Julio César Grassi de salir en libertad condicional por haber cumplido más de la mitad de la condena en prisión, el abogado de las víctimas Juan Pablo Gallego aseguró que es "improcedente". "Liberar al cura antes de que cumpla su condena es un escándalo internacional", expresó el magistrado, quien adelantó que se opondrá a la medida en caso de que sea otorgada por el Tribunal Oral en lo Criminal N°1 de Morón.
"De momento no fuimos notificados, pero sí tenemos conocimiento de que existe la petición por parte de Julio César Grassi y su defensa", afirmó Gallego. "Desde la querella consideramos que es absolutamente improcedente, y nos vamos a oponer rotundamente a este beneficio", anticipó el abogado, que lo enjuició, ayer en diálogo con TN.
En este sentido, el magistrado señaló que la salida anticipada "no es aplicable a delincuentes sexuales", por los cuales fue condenado el padre Grassi. "Debería cumplir la totalidad de la condena", sostuvo. Gallego consideró que representaría un "escándalo internacional" darle la libertad anticipada. "La propia presidenta del Tribunal Oral en lo Criminal N° 1 de Morón expresó muy gráficamente que sería de gravedad institucional que no cumpla la pena que le fue fijada en la cárcel", agregó.
"Tratándose de un delincuente sexual, que no fue desafectado en la Iglesia, sería procedente dejarlo en prisión hasta que cumpla la pena, para evitar aún más la revictimización de quienes han padecido los delitos más aberrantes", justificó el abogado de las víctimas.
El padre Grassi, de 67 años, fue condenado a 15 años de cárcel por ser culpable de los delitos de abuso sexual y corrupción de menores agravada por su condición de encargado de la educación y de la guarda en el caso "Gabriel" en la Fundación Felices los Niños. Actualmente, está preso en la Unidad 41 de Campana, donde hace cuatro meses se recibió de abogado.