Tres militares de los servicios de inteligencia del primer círculo de seguridad personal del presidente brasileño, Lula da Silva, fueron apartados de sus cargos por pasarle información confidencial de la agenda presidencial a Mauro Cid, el coronel que fue asistente de Jair Bolsonaro y que se encuentra detenido acusado de diversos delitos.
Estos tres militares leales a Bolsonaro fueron identificados como Marcio Alex da Silva, segundo teniente del Ejército; Dione Jefferson Freire y Rogerio Dias Souza, ambos suboficiales de la Marina que trabajaban en el Gabinete de Seguridad Institucional (GSI), el cuerpo que debe proteger al mandatario y a los edificios presidenciales.
"Vamos a abrir una investigación, remover a las personas antes mencionadas de sus funciones y removerlas de la presidencia. Continuaremos investigando, y se está haciendo una investigación para determinar las responsabilidades", dijo el general Marcos Antônio Amaro dos Santos, ministro del GSI, a la cadena GloboNews.
En diversos allanamientos a Cid, la Policía encontró mails enviados desde la Secretaría de Seguridad y Coordinación Presidencial del GSI por los tres militares detenidos entre el 6 y el 13 de marzo. Los correos contenían documentos adjuntos e información sobre la seguridad de Lula en agendas oficiales, con horas de llegada y salida, puntos de encuentro, itinerario, vehículos que se utilizaron en la escolta y agentes responsables de coordinar las operaciones.
El caso demuestra que existe una herencia del bolsonarismo dentro de las fuerzas de inteligencia, incluso dentro del primer círculo de seguridad de Lula. Esto se suma a las detenciones realizadas el fin de semana pasado en Santarem, estado de Pará, cuando un hacendado y un vigilador privado dijeron haber planificado un atentado contra Lula cuando pasara por esa ciudad del norte, en la previa a la Cumbre Amazónica realizada en la ciudad de Belém.
El GSI está en medio de una tormenta política generada por el intento de golpe de Estado del 8 de enero, ya que sus integrantes -los que asumieron con Lula y los que quedaron de Bolsonaro- fueron filmados dentro del Palacio del Planalto conversando e incluso ayudando a los bolsonaristas que invadieron y destruyeron la sede del gobierno.
