Argentina continúa las tensas negociaciones con el FMI para redefinir los términos del acuerdo firmado en 2022, ya el propio Massa viajará a los Estados Unidos empezar a aceitar las negociaciones que hace tiempo que están trabadas. En ese contexto Kicillof declaró: "El FMI tiene la mirada de acreedor que pide ajustar y devaluar".

Esta misma mañana, Alberto Fernández señaló que conversó con Kristalina Georgieva, la directora del FMI, y afirmó: "Estamos trabajando a todo vapor tratando de alcanzar un acuerdo. Prefiero dejar que trabajen los que están negociando y no hablar por los medios”.

Kicillof caracterizó el proyecto del organismo que "el plan de un acreedor" y, en ese sentido, sostuvo que el Fondo "abandonó" su vieja función de "equilibrar las finanzas de los países" y que ahora "es un acreedor y hasta representante y auditor de los acreedores privados".

Y se preguntó: "¿Qué le pide (el FMI) a un país como el nuestro?". A lo que respondió: "Ajustar y devaluar, que es la mirada bastante sencilla pero muy destructiva”. "Lo que pide es devaluar para que los dólares sean caros internamente y queden disponibles para pagar la deuda, y ajustar para que el Estado tenga los pesos necesarios para comprar los dólares y pagar a los acreedores externos”, remarcó.

Y agregó: "Esa política, básicamente, beneficia a los acreedores pero perjudica a la educación, la salud, la investigación, la ciencia, la tecnología, porque es un ajuste que va en desmedro de eso".