El presidente Alberto Fernández ordenó la intervención del Partido Justicialista de Jujuy. "Comulgan con un pensamiento totalmente ajeno a los principios y doctrina que fundan el pensamiento justicialista y contradicen el espíritu y la letra de la Constitución Nacional", expresó a través de una resolución que trascendió en las últimas horas.
En su rol como presidente del PJ, resolvió designar a Gustavo Menéndez y Aníbal Fernández por 360 días "a efectos de realizar todos los actos necesarios para normalizar el Partido Justicialista Distrito Jujuy". El mandatario tomó esta decisión a partir de las notas presentadas por distintos afiliados a la organización que él dirige.
Según el borrador que se difundió, Alberto Fernández consideró que un grupo de militantes manifestó su preocupación ante el avasallamiento de los derechos humanos cometido por el Gobierno de Jujuy y que un grupo de legisladores del PJ de dicha provincia "votaron favorablemente a la introducción de modificaciones en la Constitución Provincial avasallando y restringiendo derechos fundamentales consagrados por nuestra Carta Magna".
En este sentido, el presidente tomó esta medida urgente "en los términos del articulo 24 de la Carta Orgánica Partidaria" y solicitó a los interventores un amplio informe de la situación partidaria y jurídica del distrito". Cabe señalar que esta decisión se dictó "ad referéndum del Congreso Nacional del Partido Justicialista".
La vocera presidencial, Gabriela Cerruti, señaló los por qué de esta decisión. "Alberto Fernández ordenó la intervención del PJ de Jujuy para ponerlo en la misma línea del peronismo en todo el país de una clara oposición al gobierno y las políticas represivas de Gerardo Morales", argumentó.