El juez Ernesto Ángel Anastasio García Maañón salía en auto junto a su custodio del polígono donde practica tiro en Quilmes cuando los interceptó un grupo de jóvenes que intentaron robarle el auto. Así comenzó un tiroteo entre el juez y su custodio y los ladrones.
Ese enfrentamiento tuvo como resultado la muerte de Nicolás Martínez y Emmanuel Jorge Cartagena, ambos de 18 años. Cartagena murió en el Hospital Iriarte donde todavía se encuentra internado un tercer delincuente de 16 años en grave estado. El grupo de asaltantes era de entre 5 y 7 personas.
García Maañón no solo es un campeón de tiro y de karate, también escribió dos libros en materia judicial y por sus manos pasaron casos como la muerte de Diego Maradona, el crimen de María Marta García Belsunce, el asalto a Baby Etchecopar y también debe decidir sobre la libertad de Robledo Puch.
Es juez desde fines de la década del 80, en 1987 fue nombrado a cargo del Juzgado de Primera Instancia en lo Correccional. Luego del fin de siglo concursó y ganó su plaza como integrante de la Sala 1 de la Cámara de Apelaciones y Garantías en lo Penal de San Isidro.
El sábado junto a Leonardo Gabriel Nasif, policía con rango de capitán, salían de un torneo disputado en el Tiro Federal de Quilmes a bordo de un Renault Captur hacia la autopista Buenos Aires-La Plata. Los ladrones armados los interceptaron en el cruce de las calles Cevallos, entre Castelli y Paso.
“Les cortaron el paso, se abalanzaron y les abrieron las puertas del auto, agarrándolos para sacarlos”, detallaron fuentes consultadas por Infobae.
“Tanto el delincuente muerto como los heridos poseen frondosos antecedentes penales”, aseguró un investigador a la agencia de noticias Télam, quien añadió que el juez y su custodio se encuentran ilesos y que no llegaron a sustraerles ninguna pertenencia.
En el caso interviene el fiscal Martín Conde, de la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) 3 de Quilmes, y por la participación del menor de edad intervine la fiscal María Julia Botasso, del fuero juvenil 2 del mismo Departamento Judicial.
El fiscal Conde ordenó que se realicen los dermotest a las dos víctimas del robo junto con los jóvenes muertos e inició una investigación por los delitos de “homicidio y lesiones”, aunque no tomó temperamento hacia el juez ni con su custodia, al considerar que actuaron dentro de la legítima defensa.
En tanto, la fiscal de menores Bottaso dispuso las declaraciones testimoniales a las víctimas y labró las actuaciones correspondientes al delito de “robo agravado en grado de tentativa”, a la vez que dispuso la detención del adolescente de 16 años ante el Juzgado de Garantías N°1 de Quilmes.
