Con tasas del 97% anual, los depósitos a plazo fijo son una buena opción para evitar que la inflación se coma los ingresos. En el marco de la alta inflación mezclada con volatilidad, existe una herramienta que permite cuidar los ahorros a corto plazo. Estas son las cauciones bursátiles, algo así como un plazo fijo diario que se hace en la Bolsa y que ofrecen casi todas las plataformas para invertir que hay en el mercado. Algunas de ellas son IOL, Balanz, PPI, Bull Market Brokers, entre otras.
Quizá la principal diferencia entre las cauciones y el plazo fijo tradicional es que en lugar de prestarle dinero al banco, se les presta a otros inversores y con plazos de tiempo menores, ya que por lo general operan de 1 a 7 días. Aunque las tasas suelen estar por debajo de las de un plazo fijo, las cauciones cuentan con la flexibilidad de no tener un vencimiento de 30 a 90 días.
Las tasas nominales anuales (TNA) de las cauciones son del 83%, lo que significa un retorno en el mes de un 6,8%. Por ejemplo, estos son ideales para que la plata trabaje durante los cuatro días del feriado. Entonces, en la víspera del finde largo, si por ejemplo se invierten $100 mil desde el miércoles hasta el lunes, uno puede conseguir más de $1.000 de intereses.
Otros beneficios de las cauciones bursátiles
Además, otros beneficios de las cauciones bursátiles son la alta liquidez y la rentabilidad cierta. Incluso, se respaldan con títulos que el tomador entrega como garantía de pago. “Estos títulos se colocan en un Fondo de Garantía, establecido por las normas de la Comisión Nacional de Valores (CNV) y las normativas de BYMA. Dicho fondo asegura que el colocador esté cubierto al 100% en caso de incumplimiento”, explicó Maximiliano Donzelli, Head of Research de IOL invertironline.
