Samantha Miller, de 34 años, se había casado en la playa hacía horas con su novio Aric Hutchinson, de 36. Al terminar la ceremonia, la novia iba junto a su esposo y otros pasajeros en un carrito de golf y un auto los chocó por atrás. El carrito dió varias vueltas y se arrastró 90 metros. Samantha murió en el acto y Aric está internado en grave estado. Los otros tres pasajeros también resultaron heridos.

El accidente ocurrió en Folly Beach, en el estado de Carolina del Sur. Samantha murió al instante producto del impacto. Por su parte, el novio quedó herido de gravedad: sufrió varias fracturas y una lesión cerebral, por lo que debieron realizarle una cirugía reconstructiva. "Me entregaron el anillo de boda de Aric en una bolsa de plástico en el hospital, cinco horas después de que Sam se lo pusiera en el dedo y se leyeran sus votos”, escribió su madre. “Aric perdió al amor de su vida”.

El carrito de golf iba a ser el vehículo que trasladase a los recién casados después de su ceremonia en la playa. De hecho, estaba decorado con latas y un cartel celebrando el matrimonio. Sin embargo terminó bastante destrozado y volcado.

La madre del novio inició una colecta para organizar el entierro de Samantha y para poder enfrentar los gastos médicos de su hijo. La organizó a través de la plataforma GoFundMe y ya recaudó más de 395 mil dólares.

La conductora del vehículo que chocó al carrito, Jamie Komoroski, de 25 años, iba alcoholizada. Reconoció que había tomado “una cerveza y un trago con tequila” una hora antes del incidente. Además, fue acusada de homicidio imprudencial y tiene tres cargos de delito grave de conducir bajo la influencia del alcohol con resultado de lesiones graves. Su vehículo circulaba a 100 kilómetros por hora en una zona de 40.

La mujer se negó a hacer la prueba de alcoholemia y, según la policía, se encontraba “muy inestable sobre sus pies”. “Casi se cae y tuve que ayudarla a pararse”, dijeron.