Asesinaron a balazos a una mujer cuando salía de su casa con su auto y, tras el femicidio, su expareja se suicidó. El hombre era un militar que cargaba una denuncia de violencia de género realizada en su momento por la víctima. El hecho ocurrió en la capital de Chaco.

El personal de la comisaría tercera de Resistencia había sido alertado por la presencia de dos cadávers, por lo que envió de inmiediato efectivos policiales al lugar. Una vez allí, constataron que adentro de un Renault Sandero blanco había una mujer asesinada de dos balazos.

Pero a su vez, al costado del vehículo, hallaron el cuerpo de la expareja de la mujer, un empleado del Ejército argentino, muerto de un tiro en la cabeza.

En el lugar se quedaron trabajando la División de Delitos contra las Personas, un médico legista y la División de Bomberos. La principal hipótesis de lo ocurrido es que el agresor esperó a la víctima a 40 mts. de su vivienda y cuando la vio salir en el auto la encaró y la mató a los tiros. La causa, de esta manera, fue caratulada como "femicidio seguido de suicidio".

Por último, la pesquisa buscó confirmar la existencia de denuncias de violencia de género en contra del agresor y logró confirmar que el militar tenía una orden de aprehensión encima realizada por el juzgado, pero que nunca había logró hacerse efectiva.