Los abogados de los 3 femicidas condenados por el crimen de Araceli Fulles (22), cometido en 2017, pidieron hoy durante una audiencia que se revise la condena a prisión perpetua por "inconsistencias en uno de los peritajes".
Los femicidas de Araceli son Carlos Damián Cassalz, Marcelo Ezequiel Escobedo y Hugo Martín Cabañas, condenados en 2021 luego del juicio, que dejó en libertad a 5 de los 7 sospechosos. Fueron absueltos por falta de pruebas Hernán Rodrigo Badaracco, Carlos Antonio Ibarra, Daniel Alaniz y los hermanos Jonathan y Emanuel Ávalos.
Hoy los abogados de los condenados apelaron frente a la Cámara de Casación refiriéndose al peritaje realizado por Marcos Herrero, el adiestrador de perros, al considerar que hubo “deficiencias en el levantamiento y conservación de las muestras”.
Los abogados de los acusados cuentan con el apoyo de la fundación "Innocence Project", se refirieron de la misma manera al video del día que se encontró el cuerpo de Araceli Fulles. El comunicado de la organización sostuvo que "es posible observar a una de las personas que acompañaban al guía Herrero tocar la escena del hecho sin utilizar ningún elemento de protección, a lo que alguien, a quien no se observa en cámara, le reprocha ‘no toques’".
Crimen de Araceli Fulles
El cuerpo de Araceli Fulles fue encontrado el 27 de abril de 2017 bajo unos escombros del patio de la casa de Darío Badaracco, en José León Suárez, San Martín, tras 25 días de búsqueda. La última vez que se la vio fue en una plaza cercana la madrugada del 2 de abril, su última comunicación había sido con su madre, a la que le escribió a las 6:30 de la mañana, "Vieja, poné la pava que estoy yendo para casa".
La mataron por ahorcamiento, en el que participaron Darío Badaracco, Marcelo Escobedo y Hugo Cabañas, que le causaron "asfixia mecánica" por "estrangulamiento a lazo", según lo informado por la Justicia. La causa se caratuló como "homicidio agravado por femicidio y por la participación de dos o más personas".
Reconstrucción de los hechos
La noche anterior, Araceli cenó en el domicilio de un amigo apodado “Batata” y luego se dirigió a la 1:30 de la mañana hacia la casa de uno de los cinco absueltos, Emanuel Ávalos. A las 3:00 de la mañana Araceli se dirigió junto con Ávalos hacia la Plaza 9 de Julio, donde se encontró con Jonathan –hermano de Emanuel-, Darío Badaracco y Marcos Ibarra. A las 6.30 de la mañana, Araceli le envió el mensaje a su madre, Mónica Ferreyra.
La escena del crimen, que se produjo en el corralón de Carlos Cassalz, lugar a donde se dirigió Araceli a eso de las 7:00 a.m, fue validada por los jueces a partir del "marcamiento positivo de olor" de perros adiestrados, que dieron cuenta de la presencia de Araceli en la oficina, baño y terraza del corralón.
Luego del crimen, también se pudo probar que los asesinos de Araceli ocultaron su cuerpo en el baúl de un Renault Megane 19 perteneciente al condenado Escobedo "cuanto menos de seis a nueve días".
Finalmente, tras 25 días de búsqueda, el cuerpo de Araceli fue hallado el 27 de abril debajo de unos escombros, en el patio de la casa de Darío Badaracco, ubicada en Alfonsina Storni 4477, tras la intervención de perros pertenecientes a los Bomberos Voluntarios de Punta Alta.
También se pudo probar que los asesinos de Araceli ocultaron su cuerpo en el baúl de un Renault Megane 19 perteneciente al condenado Escobedo "cuanto menos de seis a nueve días".
En el comunicado de la fundación que pide la reducción de condena de los acusados también se lee, "más tarde en esa misma secuencia fílmica, se escucha al guía Herrero preguntarle a alguien: ‘¿tenés guantes vos?’. Lo reseñado permite, cuanto menos, efectuar algunas inferencias sobre el desempeño del Sr. Herrero y su equipo en estos aspectos”.
El adiestrador canino tiene una condena por "falsa denuncia" y "encubrimiento" por la desaparición de Viviana Luna en la provincia de Mendoza en 2016.
La fiscal Daniela Bersi y el abogado querellante Diego Szpigiel rechazaron los planteos de la defensa, indicando que se trató de una "condena justa", mientras que se opusieron a que la condena del adiestrador de perros Herrero sea considerada como prueba ya que remite a un hecho diferente al de este caso.
