Luego de seis años de prohibición, Rafael Di Zeo y Mauro Martín regresaron ayer a comandar la barra de Boca Juniors en La Bombonera, durante la derrota 1-2 ante Colón.

Los dos líderes de La Doce estuvieron en realizando registros para sus redes sociales desde temprano, en el paravalanchas del estadio, al que no tenían permiso para ingresar desde el 1° de abril de 2017, en la victoria 1-0 ante Defensa y Justicia.

Dos días después de ese partido, ambos fueron incluidos en la lista de los hinchas a los que se aplicaba el derecho de admisión, luego de que esa facultad fuera trasladada de los clubes al Estado, por iniciativa de la entonces ministra de Seguridad, Patricia Bullrich.

Primero fue por dos años, pero en 2019 renovaron la medida por otros cuatro más. En ese intertanto, Di Zeo y Martín solo pudieron asistir a los partidos de Copa Libertadores o a los amistosos.

Pero este domingo la medida terminó y no hubo renovación. En consecuencia, los hinchas buscaron probar que nunca perdieron la batuta de su grupo. Y, a través de la cuenta de Instagram de la barra (@lanro12oficial) exhibieron con fotos y videos que siguen mandando.

Di Zeo y Martín fueron sobreseídos el mes pasado por una causa de encubrimiento agravado de Maximiliano Oetinger, tercero de la barra, a quien se le acusó de secuestro extorsivo.

Di Zeo, además, fue absuelto el mes pasado en un juicio en el que estaba acusado de haber instigado el crimen de dos barras en la interna de La Doce en 2013 y también de facilitar la formación de grupos violentos en espectáculos deportivos. Ese fallo no está firme porque desde entonces el fiscal, que había pedido cuatro años de prisión para el jefe de La Doce, tiene diez días hábiles para apelar, plazo que se cumple recién este miércoles.

Considerando estos antecedentes, los hombres de seguridad de la Ciudad de Buenos Aires y los de Nación excluyeron a ambos líderes de la lista negra, permitiendo su regreso triunfal ayer en La Bombonera.