Un carnicero de 55 años sufrió un accidente laboral luego de meter su brazo izquierdo en una picadora de carne industrial. El hombre estaba arreglando la máquina durante un corte de luz, y la moladora comenzó a funcionar cuando volvió la energía. Después de dos horas de trabajo constante por parte de la policía y los bomberos para desarmar la maquinaria por completo, lograron rescatar a la víctima a quien tuvieron que amputarle parte del brazo.
El hecho ocurrió en un local comercial ubicado en las calles Caseros y Paraguay. Según los vecinos del Barrio Alberdi, de la ciudad de Córdoba, se registró un corte de luz en el barrio cuando el carnicero estaba reparando la moladora y, al volver la electricidad, el artefacto le succionó el brazo. Rápidamente se dio aviso a la policía, y frente al panorama tomaron la decisión de probar técnicas diferentes hasta desarmar la máquina por completo para poder liberarlo. El hombre fue trasladado al Hospital Ferreyra, donde fue revisado por los médicos. Notaron que para cuidar la salud de la víctima debían amputarle una parte del brazo.
Los expertos en este tipo de maquinarias siempre resaltan la importancia de seguir estrictamente las normas de seguridad en el lugar de trabajo. Con un simple descuido o error puede derivar en graves consecuencias. Incluso hay que estar atento a los peligros que pueden surgir en cualquier momento, más aún en el momento de la reparación o mantenimiento de la moladora.
Las declaraciones sobre el accidente del carnicero
“Siempre estuvo consciente, fue muy valiente, aunque siempre estuvo contenido por nuestro personal. No hablaba mucho, solamente se quejaba del dolor”, dijo Luciano Castro, jefe del operativo. Además, habló un vecino y contó que estaba trabajando cuando el dueño abrió la carnicería a eso de las 6 de la tarde y encontró al chico atrapado en la picadora de carne.
“A mí se me cortó la luz también a las 5, volvió y se volvió a cortar. Quiero creer que pasó en ese momento pero, por lo que sé, recién lo encontraron cuando el dueño de la carnicería vino, porque este es un lugar bastante ruidoso y aunque haya pedido auxilio no lo escuchó nadie”, agregó el vecino.
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