La Aduana interceptó a un vehículo brasileño que intentaba ingresar al país, rumbo a Puerto Iguazú, con un millonario cargamento de semen de toro, en el que se contabilizaron alrededor de 200 embriones congelados.
El descubrimiento se produjo durante una revisión de rutina, en la que se detectó un bulto disimulado entre prendas de vestir, debajo de las cuales estaba un recipiente de nitrógeno de los utilizados para el transporte de material vivo.
La Aduana avisó al Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (SENASA), que ahora someterá a análisis las muestras para determinar con precisión la raza, pedigree y otras características de los embriones.
El valor de mercado de cada una de estas piezas oscila entre los 2 mil y 3 mil dólares, por lo que se estima que su contrabando implicaba una operación total de, al menos, medio millón de dólares.
Desde la Aduana, explicaron además que esta modalidad de inseminación se utiliza en grandes razas, donde el valor se multiplica si se trata de ejemplares de reproductores campeones en ferias especializadas.
Todo el cargamento de semen de toro fue secuestrado por la aduana, mientras que el transportista fue detenido por infracción a la Ley 22415 (Código Aduanero).
