Máximo Kirchner pronunció anoche un discurso en el que criticó duramente las declaraciones de Kristalina Georgieva, directora del FMI, sobre las acciones dolorosas que debería tomar la economía Argentina para estabilizarse.
Desde Escobar, el diputado criticó a los sectores del gobierno, encabezados por el propio Alberto Fernández, que han guiado las negociaciones con el fondo hasta ahora. “A ver cuándo aprenden que dar debates internos no significa ponerse del lado de Drácula para tener razón”, dijo.
Para Ernesto Tenembaum, estas declaraciones, lejos de ayudar a destrabar la crisis, la agravan. “Máximo pudre o dificulta la negociación con el fondo” porque inhibe la confianza en la que hasta ahora ha sido la principal apuesta del gobierno: fortalecer el mercado del peso local.
Máximo pudre o dificulta la negociación con el fondo
El periodista explicó que la radicalización de las posturas de Kirchner llevan, inevitablemente, a que los inversores se protejan, considerando que es “el sector de Máximo el que termina imponiéndose”.
“El discurso de Máximo empioja una situación que ya está bastante empiojada. Algo que no debiera pasar es que desde el mismo Frente de Todos se promueva la inestabilidad, porque si eso pasa, los rumores que molestan a Cerruti toman verosimilitud y entonces el dólar llega a 300 y los precios suben sin control”, explicó.
