El canciller de Hacienda, como le dicen en Inglaterra al ministro de Economía, y el secretario de Salud del gobierno de Boris Johnson renunciaron a sus puestos. Rishi Sunak, el funcionario que se encargaba de la economía del gobierno de los tories, renunció explicando que el gobierno debería comportarse "de forma competente, apropiada y seria". Sajid Javid, por su parte, comentó que el gobierno no está "actuando en función de los intereses nacionales".

Ambas renuncias llegaron apenas minutos después de que el primer ministro Boris Johnson pidió perdón por nombrar a Chris Pincher, un diputado acusado de abuso sexual, en un rol ejecutivo. El líder inglés admitió haber cometido un "grave error" al convocar a Pincher para ser el "whip" de su partido, el encargado de sostener la disciplina parlamentaria.

El dirigente conservador británico se pasó de copas, y comenzó a intentar pellizcar y apretar los glúteos de algunos asistentes al bar en el que estaba

Pincher, el protagonista del escándalo, debió renunciar a su puesto luego de una noche de alcohol. Aparentemente, el dirigente conservador británico se pasó de copas, y comenzó a intentar pellizcar y apretar los glúteos de algunos asistentes al bar en el que estaba.

Desde el 2019, cuando Johnson se convirtió en primer ministro, el gobierno británico se vio envuelto en una serie de escándalos que llegaron a su cenit cuando se descubrió que Johnson organizó fiestas durante la cuarentena por el Covid. A partir de eso, se le impuso una multa al primer ministro, convirtiendo al líder tory en la primer persona en ser sancionada por romper la ley mientras ocupa el máximo cargo del poder ejecutivo.