Silvina Batakis será la reemplazante de Martín Guzmán y asumirá como ministra de Economía en las próximas horas.
Nació en Río Grande, Tierra del Fuego, el 27 de diciembre de 1968 y vivió en Río Gallegos, Rafaela, Taco Pozo (Chaco) y La Plata, ciudad que adoptó como propia.
"La griega", como la llaman sus allegados, es licenciada en Economía y Master en Finanzas Públicas de la Universidad Nacional de La Plata y también tiene un Master en Economía Ambiental de la Universidad de York, Inglaterra.
Su trayectoria política
Batakis llegó a la administración pública en 1992. Pasó por diferentes cargos en varios ministerios, hasta recalar en Economía en la Provincia de Buenos Aires durante la gestión de Daniel Scioli. El ahora ministro de Desarrollo Productivo había anunciado durante su candidatura que ella ocuparía el rol en la cartera económica si él fuese electo presidente.
Antes fue Jefa de Gabinete de Asesores del Ministro de Economía, Directora de Zonas Francas, Directora Provincial de Economía Ambiental y Energías Alternativas en el OPDS, Directora Provincial de Estudios Económicos en el Ministerio de Economía y asistente en la Dirección de Planificación del Ministerio de Infraestructura.
El fanatismo de Silvina Batakis por Boca
Batakis es, además, una reconocida fanática de Boca Juniors y, en sus redes sociales, pueden verse fotos con ex jugadores como el Flaco Schiavi, Carlos Tevez, Martín Palermo y Diego Maradona.
Además, se ufana de ser la responsables de que Daniel Scioli se haya hecho socio del club de la rivera. “Él es hincha de Boca y no era socio. Un día fui a su casa para que me firmara unos convenios y le pregunté si no quería que lo hiciera socio. Había tres o cuatro personas que lo cargaban. Pero me dijo que sí, le pedí la foto del documento, una foto carnet, me la dio y se los pasé a Silvia Gottero, que el mismo día se lo hizo”, contó hace un tiempo en una entrevista con revista La Tecla.
Su amor por Boca es tan fuerte que incluso va a la cancha sin compañía, tal como le reveló un compañero de gabinete a La Nación en 2012: "Es ferviente seguidora de Boca. Va a la cancha sola o con su hijo. A su marido no le gusta el fútbol, pero ella se vuelve loca".
