La Conmebol suspendió a los árbitros uruguayos que no expulsaron a Nicolás Otamendi en el partido de ayer entre Argentina y Brasil ya que en las grabaciones se observa perfectamente la agresión al jugador brasilero Rafhinha.
Luego de celebrar la clasificación de la selección argentina en el Mundial Qatar se desató la polémica entre los espectadores y especialmente dentro del VAR luego de que Nicolás Otamendi saliera indemne por darle un codazo en la cara a Rafhinha a los 33 minutos del primer tiempo.
A pesar de las protestas de los jugadores brasileños, tanto el juez principal, Andrés Cunha, como el del VAR, Esteban Ostojich, dejaron pasar la situación sin sanción. Por ese motivo, ambos fueron suspendidos por tiempo indeterminado por la Conmebol.
Ostojich había calificado este hecho como un “uso indebido del brazo con intensidad media” y luego de sugerir cobrar "falta por lo menos" decidió optar por un saque de arco. El delantero brasilero tuvo un corte en la boca y sangrado luego del hecho.
Por su parte, la Conmbeol sostuvo que el VAR "debió llamar al árbitro para una revisión de campo por potencial tarjeta roja” y consideró que fueron errores graves por lo que se decidió suspender a los árbitros Andrés Cunha y Esteban Ostojich "por tiempo indeterminado en el ejercicio de sus funciones en competiciones organizadas por Conmebol”.