Sin dudas fue el momento más confuso y discutido del superclásico de este domingo. Cerca de los 8 minutos de la segunda parte del partido, la pelota pegó en la espalda de Cristian Lema y se le metió adentro del arco a Romero que, a puro reflejo, logró sacarla. Pero fue tan sutil el manotazo de Chiquito que generó una controversia que se mantendrá por varios días: ¿la pelota entró o no?
Al principio de la segunda mitad del partido, el gol inicialmente fue confirmado por Yael Falcón Pérez y su asistente, pero finalmente se anuló después de revisar el VAR. No obstante, las diversas imágenes y ángulos mostrados en la transmisión generaron opiniones divididas.
Y es que milímetros determinaron si el desafortunado rebote de Lema resultaba en gol o no. La decisión de anular el gol fue clave en cómo se desarrolló el resto del partido y en su resultado final. Siete minutos más tarde, Boca marcó el segundo gol gracias a Cavani, y poco después, Merentiel añadió el tercero.
Qué dice el reglamento
La regla 10 del reglamento de la International Football Association Board (IFAB) consigna que la pelota debe atravesar completamente la línea entre los postes y por debajo del travesaño para ser considerado un gol válido. En el superclásico, no se pudo determinar a simple vista si la totalidad de la circunferencia cruzó la línea.
Desde ciertos ángulos parecía que no era gol, mientras que otras cámaras sugerían que la pelota había cruzado completamente la línea. Dado que en Argentina no se cuenta con un sistema automático de detección de goles, la decisión final se basó en el análisis de líneas realizado desde el VAR.
