Tres novelas tan crudas como emocionantes confluyen en la Trilogía del agua, el libro que presentará la escritora Claudia Aboaf la próxima semana. Una Argentina y un mundo distópicos, devastados por la crisis climática y más cercanos a la realidad de lo que muchos querrán creer, son el escenario en Pichonas, El rey del agua y El ojo y la flor, las tres novelas que reúne esta nueva edición. La cita es este lunes 8 de abril en el Museo Evita (Lafinur 2988, CABA) a las 19 horas, y tendrá la participación de Dolores Reyes y Alan Pauls.

“Siguiendo los rastros de futuro que se suceden en la cuenca del río Paraná, la explotación abusiva del agua dulce es un signo que evidencia desastres inminentes. Juana y Andrea, las hermanas protagonistas de esta historia, son como dos cursos de agua que parecen no encontrarse jamás. El gesto fundacional de dividir sus destinos imita los binarismos brutales que han interrumpido el diálogo con la naturaleza y desnuda nuestra relación con la tecnología”, se lee en la web de Penguin Libros sobre la Trilogía del agua.

Esta edición completa y revisada por Aboaf, que reúne las tres creaciones mencionadas, representa un potente llamado de atención sobre la crisis ecológica que golpea a nuestro mundo impulsada por el extractivismo y la voracidad capitalista. En su universo de ciencia ficción climática, como queda expuesto en El rey del agua, Tigre se convirtió en un municipio rico porque el agua está al límite del agotamiento y fue capitalizada como un recurso extremadamente valioso. Ese imperio, sin embargo, cae en El ojo y la flor, cuando la escasez alcanza incluso al privilegiado municipio del Norte bonaerense.

“Para publicar esta versión revisada”, explicaba Claudia Aboaf, citada por Página 12, “tracé un mapa fluvial que va desde las Cataratas de Iguazú hasta la desembocadura del Río de la Plata, un mapa de la Cuenca del Paraná. El derrotero de las hermanas es el del agua marrón que tanto me conmueve y que finalmente teje la Trilogía entera. Por eso busqué a Adriana Bustos, la artista que ilustra la tapa y el interior del libro con fragmentos de su maravilloso mapa fluvial”.

La escritora Leila Guerriero valoró la Trilogía del agua como una obra que posee “un lenguaje riquísimo, envolvente, que resulta tremendamente perturbador precisamente por su ferocidad lírica y que recuerda al de Marosa di Giorgio y Agota Kristof”.

En otra de las críticas, su par Gabriela Cabezón Cámara escribió: “Ciencia ficción climática, le dicen algunos a lo que hace Aboaf. Pero no. Es literatura nomás. De esa que ve. Claudia puede, desde el centro profundo del río que es la literatura. Y vuelve para contarlo en sus mundos tan distópicos como líricos, tan crueles como humanos, tan duros como, también, llenos de amor”.

Foto principal: Claudio Larrea.