Una mujer fue condenada a pagarle en resarcimiento a su exmarido de $12.800.000 pesos por "escracharlo en las redes". La investigación de la Justicia de Santiago del Estero, que duró tres años, determinó que además lo hostigaba con diferentes perfiles falsos en distintas plataformas.
La mujer en cuestión fue condenada por calumnias e injurias. En la calumnia se refiere a la falsa imputación de un delito; mientras que la injuria afecta la reputación y el honor de la persona agraviada. El abogado de la querella, Rolando Gómez Vélez, contó algunas de las particularidades que tuvo el caso, al que definió como "odisea judicial".
"El proceso comenzó antes de la pandemia, cuando una mujer, no contenta con la separación de su pareja, comenzó a escracharlo mediante numerosas publicaciones en redes sociales. Le enviamos una carta documento para intimarla al cese de las publicaciones, bajo el apercibimiento de iniciar las acciones penales y civiles. Nunca contestó la carta documento y dio pie a realizar la denuncia por calumnias e injurias", explicó.
En este sentido, agregó: "Esto posibilitó que la Justicia acceda a su celular y se pudo comprobar que ella era titular de una innumerable cantidad de perfiles en las redes que difamaban a mi cliente. Esto, sumado a un sinnúmero de capturas de pantalla que tenía en su celular mi cliente llevaron al Juez a tomar la decisión correcta".
El abogado explicó que se pidió el resarcimiento por "daños y perjuicios" además del cese de las publicaciones. "El juez no puede obligar a alguien a no hacer esto si la persona no quiere. Pero sí la puede obligar a pagar una indemnización en concepto de daño moral causado al honor, el buen nombre y la dignidad de mi cliente", contó Gómez Vélez.
En el fallo emitido ayer, el juez argumenta que “no importa si las acusaciones son reales o no contra la víctima. Bajo ningún punto se puede menoscabar el honor en ninguna circunstancia, pues estamos frente a un derecho personalísimo que debe ser protegido”. El damnificado se dedicaría al rubro comercial y las denigraciones permanentes de su exmujer le habrían hecho perder una cantidad importante de clientes y dinero.