Tras el despido de Omar Yasín de la Secretaría de Trabajo, el Gobierno no tardó ni 24 horas en encontrarle reemplazo. A pesar de que no oficializaron la designación, lo cierto es que el Ejecutivo ya se inclinó por Julio Cordero, el abogado laboral del Grupo Techint.
La rápida incorporación de un nombre vinculado a Paolo Rocca, muestra que la destitución de Yasín de Trabajo, lejos de relacionarse con una contingencia como el decreto por la suba de sueldos, era más bien una decisión que se venía gestando hacía tiempo.
Cordero cuenta con el apoyo de de Nicolás Posse, el jefe de Gabinete de Milei. Su designación podría entenderse como un gesto para el empresariado, en medio de la intención del Gobierno con una reforma laboral.
Además de su rol en Techint, Cordero es vicepresidente del departamento de Política Social de la Unión Industrial Argentina (UIA) y mantiene una mirada similar a la de Milei en materia de políticas laborales. De hecho, Cordero tuvo protagonismo el año pasado, cuando marcó su férrea oposición a las iniciativas del gobierno anterior en materia laboral.
En su momento el gobierno de Alberto Fernández había presentado como iniciativa en el Congreso la propuesta de una reducción de la jornada laboral. "Yo limito la jornada para que trabaje menos, ¿para qué? ¿O sea, está mal trabajar, estamos en contra del trabajo? ¿Para qué, para ir afuera a hacer qué?”, dijo Cordero en su momento.
La incorporación de Cordero en el Gabinete es la muestra de que el gobierno no piensa reencauzar el diálogo con la CGT. El abogado de Techint tiene pésima relación con el sindicalismo y su llegada a la Secretaría de Trabajo muestra las intenciones de avanzar con una fuerte reforma laboral.
