Desde Roma, donde espera para reunirse con el Papa Francisco, Milei pidió por las renuncias del titular de la Anses y la secretaria de Minería. Se trata de Olsvaldo Giordano y Flavia Royón, ambas figuras que responden a los gobernadores peronistas.
La decisión va en línea con el enfrentamiento que el presidente mantiene con los gobernadores tras la trunca sesión por la Ley Ómnibus que derivó en el retiro del proyecto de ley en el Congreso y un fuerte descargo de Milei en sus redes sociales.
De acuerdo con el comunicado que se difundió: "la crisis económica heredada y el momento histórico actual requieren funcionarios públicos comprometidos con la modernización, simplificación y desburocratización del Estado".
"Quienes asumen la responsabilidad de un cargo público deben comprender la dura realidad que enfrentan los argentinos, y defenderlos del constante ataque de aquellos que pretenden sostener sus privilegios a costa del hambre del pueblo", agrega.
De acuerdo, con la misiva, los "respectivos sucesores serán anunciados en los próximos días". Al mismo tiempo, mientras conducía su progama en LN+, Eduardo Feinman deslizó: "Hablé con alguien muy cercano al presidente y me dijo que cuando llegue a Buenos Aires, hace más limpieza".
A la lista de pedidos de renuncia se podrían sumar Franco Mogetta (Transporte), Daniel Tillard (Banco Nación) y Luis Giovine (Obras Públicas). La idea es hacer una modificación en el gabinete, mediante el cual salgan los funcionarios vinculados a gobernadores peronistas e ingrese el ala dura del PRO.
Los mandatarios provinciales más apuntados por el Gobierno son Llaryora, Sáenz y Maximiliano Pullaro. Precisamente, Giordano responde al cordobés y Royón al salteño. El nuevo diseño del gabienete contaría con el partido de Macri como principal aliado, ya que fueron sus diputados los que brindaron un 100% de apoyo a la Ley Ómnibus mientras se debatía en el recinto.
De esta manera, se profundiza la alianza entre el PRO y La Libertad Avanza. Esto serviría para fortalecer al Poder Ejecutivo, que durante lo que va de la gestión de Milei estuvo sumido en un conflicto permanente con los gobernadores y los legisladores dialoguistas.
