La Convención Nacional de la Unión Cívica Radical (UCR) se pronunció anoche sobre el proyecto de Ley Ómnibus que se trata por estos días en Diputados, luego de varios días sin una toma clara y unificada de posición. En un comunicado publicado en sus redes, el partido presidido por Martín Lousteau criticó “la forma y el fondo” de la norma.
“Comprendemos el momento dificilísimo que vive nuestro país, consecuencia de un pésimo gobierno que concluyó en 2023, pero no queremos que estos se agraven a partir de iniciativas improvisadas y poco democráticas que quiere llevar adelante el nuevo gobierno”, se lee al comienzo del comunicado de la UCR.
Dicho esto, los miembros de ese partido explicaron su oposición a la “forma” en que se presentaron las reformas perseguidas por el gobierno de Javier Milei. Para ello, se refirieron a “un proyecto de ley inabarcable, heterogéneo y con altas dosis de improvisación”, y añadieron: “Somos sumamente críticos, sobre todo teniendo en cuenta las convicciones republicanas que enarbolamos históricamente desde el radicalismo”.
“Sobre las cuestiones de fondo, cuestionamos la mayoría de las iniciativas propuestas por el gobierno, como las facultades delegadas, la derogación de la fórmula jubilatoria, la suba de las retenciones para las economías regionales, las privatizaciones y la modificación del régimen electoral, entre muchas otras”, continuaron.
Asimismo, se mostraron “enfáticos” respecto de “aquellos puntos que no están formulados como centrales para el gobierno -cuestiones ambientales, de infancia, de género, de cultura, científicos, entre otros- que nos resultan tan claves y rebatibles como los primeros”.
Sobre el final del comunicado, la Convención Nacional del partido destacó el "gran trabajo" que están haciendo los diputados y diputadas de la UCR, al "estudiar y discutir seriamente el proyecto".
Ese trabajo de los legisladores intenta, según puntualiza el mensaje, conciliar dos aspectos: "dar las herramientas indispensables de gobernabilidad al nuevo Gobierno votado por 15 millones de argentinos" y, a la vez, "mantener sin menoscabo nuestros ideales".
En definitiva, quedará en manos de esos diputados ser consecuentes con las oposiciones enumeradas o contentarse con unas pocas modificaciones superficiales.
Finalmente, la UCR no rechazó de plano el proyecto sino que aseguró que se propone "procurar un dictamen propio", que "contemple los ideales del radicalismo y que pueda servir de base para obtener el consenso de otras fuerzas políticas que compartan nuestros valores democráticos, republicanos y federales".