Tras un escrutinio que se extendió desde la elección del pasado 22 de octubre, la justicia electoral de la provincia de Buenos Aires oficializó a Julio Alak como nuevo Intendente de La Plata.
La decisión de la junta electoral se produjo este jueves luego de la revisión de 79 urnas que, por pedido del actual intendente, Julio Garro, fueron abiertas y revisadas. El escrutinio arrojó que 77 de éstas no presentaban irregularidades y tras el reconteo, los integrantes de la junta decidieron que el comicio estaba decidido en favor de Alak.
Los jueces los jueces Roberto Lemos Arias, Sergio Torres y Alejo Ramos Padilla detallaron durante una conferencia de prensa, que en el recuento definitivo de sufragios Alak sumó 166.479 y Garro 165.873, es decir, 606 más en favor del expresidente de Aerolíneas Argentinas.
A la vez, los magistrados plantearon que "de los resultados obtenidos luego del proceso de recuento, no se produjo ninguna modificación jurídicamente relevante para la categoría a intendente" respecto de los números que se habían expresado durante el escrutinio provisorio.
De los resultados obtenidos luego del proceso de recuento, no se produjo ninguna modificación jurídicamente relevante para la categoría a intendente
Aclararon los funcionarios judiciales que si bien durante el transcurso del escrutinio, se encontraron dos urnas en cuyo interior no existían boletas de ningún partido, sí se hallaban las actas, que estaban debidamente firmadas por las autoridades de mesa y por todos los fiscales partidarios, "sin ningún tipo de observación, enmienda, ni tachadura".
"Al confrontar esas actas, las mismas coincidían con los originales que se habían llevado las distintas fuerzas políticas el día de la elección", se puntualizó y se indicó que por ello se rechazó el pedido de Juntos de declarar la nulidad de esas dos urnas.
Desde la candidatura del actual intendente Garro, además, pidieron abrir las más de 1.500 urnas de la ciudad, lo que fue desestimado por el consejo, entre otros motivos, porque la solicitud se produjo 48 horas más tarde del plazo estipulado para estos efectos.
"La Cámara Nacional Electoral, desde hace más de 30 años, ha construido una jurisprudencia mediante la cual interpreta que si existen las actas, aun con el faltante de boletas, la urna es válida", subrayaron los jueces.
Sostuvieron que "si se declarara la nulidad de dichas urnas, se estaría frustrando la voluntad del resto de los electores de esa mesa que ese día expresaron su preferencia política".
Con todo, se aclaró que si la Junta hubiera hecho lugar al pedido de nulidad, tampoco hubiera modificado el resultado de la elección y rechazó la solicitud de Garro de abrir la totalidad delas urnas no sólo por extemporáneo sino porque ello "desnaturaliza completamente el procedimiento electoral y pone en tela de juicio la transparencia de los procesos electorales; extendiendo indefinidamente la finalización del escrutinio definitivo".
