Un vecino de La Plata redujo a un delincuente que había asaltado un comercio con una llave de jiu-jitsu. Una mujer que pasaba por la zona sacó el teléfono y filmó la maniobra con la cual el hombre detuvo al ladrón. El asaltante finalmente terminó detenido y permanece en una dependencia policial.

El ladrón en cuestión entró al comercio y se hizo pasar por un cliente. Una vez allí intentó robarle a un empleado que manejaba la caja registradora. El testigo del hecho indicó: “Quiso quedarse con el dinero pero había gente en el interior del local y eso hizo que se fuera corriendo”.

Debido a esto, la gente que se encontraba en el lugar salió detrás de él e hicieron todo lo posible para atraparlo. El delincuente avanzó tres cuadras, pero un grupo de jóvenes lo sorprendieron. Sin embargo, el ladrón logró deshacerse a los empujones, hasta que un hombre lo tiró al piso y le aplicó una llave de jiu-jitsu.

El vecino sostuvo al asaltante con su brazo derecho mientras que los dos agentes de la Policía bonaerense tratando de esposarlo. Ya que el ladrón intentaba escapar, el hombre aplicó la maniobra cada vez con más fuerza. “Tengo hijos. ¡Me vas a quebrar, me vas a quebrar el brazo! ¡Tengo hijos!”, rogó el delincuente.

Finalmente, el ladrón se dio por vencido. La policía pudo proceder con el arresto sin ningún problema. Según indicaron varios vecinos del barrio, episodios similares ocurrieron en la zona en los últimos días. En Córdoba, en marzo, un ladrón quiso robar una moto estacionada frente a un gimnasio.

Mientras intentaba llevar a cabo el robo, apareció un luchador de Artes Marciales Mixtas (MMA), que lo redujo con una toma de jiu-jitsu hasta que llegó la policía. “Guachín, no te confundas con nosotros ¿A quién le vas a robar?”, le dijo al delincuente mientras lo sujetaba.

“Qué te robé a vos? Nada. Ya está, soltame”, le pidió el asaltante. Con sus miembros superiores alrededor del cuello y las piernas sujetas a las del ladrón, el artista marcial esperó hasta que llegara la policía. Por si fuera poco, después le pegó dos cachetazos al criminal.