Mientras la Cámara de Casación mantiene una reunión plenaria para definir la situación de Ana María Figueroa, Romina Manguel consideró que “el kirchnerismo le hizo mucho mal” a la jueza “intentando que se quede” aun cuando no recibió el apoyo del Senado que se necesita para permanecer en el cargo.
“En este momento la Cámara de Casación Federal convocó una reunión de urgencia porque hay una jueza medio atrincherada. Es Ana María Figueroa, que cumplió 75 años, edad a la que debería jubilarse a menos que tenga acuerdo del Senado para seguir”, introdujo Manguel por La Inmensa Minoría.
“El kirchnerismo quería que siga, pero no consiguió el número para tener el acuerdo. Para mí le hacían daño a Figueroa”, continuó la periodista. De este modo, remarcó la alevosía de los intentos del oficialismo por mantener a la jueza en su cargo en un contexto en el cual “Casación tiene que intervenir en causas como Hotesur - Los Sauces, por ejemplo, donde están los hijos de Cristina Fernández de Kirchner” y “en la causa de reapertura o no del memorándum de entendimiento con Irán”.
Creo que le hizo mucho mal el kirchnerismo intentando que se quede.
Para Manguel, el kirchnerismo parece decir “esta jueza es mía, queremos que siga” porque “juega para nosotros”, lo cual constituye un gran “nivel de obviedad”. A pesar de esta voluntad del oficialismo, no hubo acuerdo en el Senado, Ana María Figueroa cumplió 75 años el 9 de agosto y se tiene que ir. Ahora bien, aunque “dejó de firmar y cedió el cargo institucional en Casación a Mariano Borinsky”, la funcionaria sigue “cobrando tres palos y medio y no se va”, remarcó la periodista.
“Entonces hoy llamó Borinsky una reunión a todos los jueces de la Cámara de Casación, que es la cámara que está arriba de los jueces de Instrucción y termina decidiendo, para decidir qué hacen con Figueroa que para muchos está atrincherada, no se va, no firma, pero sigue cobrando”, explicó Romina Manguel.
“Creo que le hizo mucho mal el kirchnerismo intentando que se quede”, recalcó la columnista para concluir.